La UE intenta mostrar unidad ante la vuelta de Trump y la guerra en Ucrania: Orban brinda con vodka en un mundo carnívoro
Los líderes europeos sigue en Budapest en una cumbre informal marcada por la vuelta de Trump a la Casa Blanca y la implicación de más actores en la guerra de Ucrania. "Cualquier cesión a Rusia es inaceptable para Ucrania y un suicido para Europa", defiende Zelensky
Budapest
La Unión Europea se somete en Budapest a una especie de terapia colectiva. Los 27 se han propuesto abordar los desafíos de un nuevo tiempo con Donald Trump en la Casa Blanca; con una guerra, la de Ucrania, que tiene cada vez más actores implicados y por tanto más riesgos; y con fisuras dentro de un Consejo Europeo que ha apostado por relegar el desánimo o el shock de la victoria de Donald Trump y pasar a la acción. Al menos determinar el punto de partida. Y ese punto puede ser una pregunta: ¿Cuáles son nuestras debilidades y qué papel queremos jugar en un mundo cada vez más violento y con un actor, Estados Unidos, dispuesto a saltarse todas las normas?
Hay consenso en que Europa tiene que caminar de forma más autónoma en defensa "No podemos seguir subcontratando nuestra seguridad a los americanos", defendía ayer el presidente francés Enmanuel Macrón, "ellos defenderán sus intereses, nosotros tenemos que defender los intereses europeos". "El mundo está formado por herbívoros y carnívoros. Si decidimos seguir siendo herbívoros, los carnívoros ganarán y seremos un mercado para ellos. No sería mala idea optar por ser omnívoros, no quiero ser agresivo, sólo quiero que sepamos defendernos en estos temas", defendía el galo. Una opinión, la de ser más autónomos en defensa, compartida prácticamente por todos los presentes. Porque el horizonte está claro: más autonomía en defensa, más competitividad en nuestra economía. Pero las fisuras llegan, se amplían y muestran las profundas divisiones cuando hablamos de la guerra en Ucrania.
Orban no quiere hablar todavía de paz y Zelenski advierte del peligro de ceder ante Rusia
Frente a una mayoría de líderes que aboga por un apoyo incondicional a Kiev, y con la promesa de Donald Trump de acabar con la guerra en 24 horas, el anfitrión Orban vuelve a salirse de la ecuación. El primer ministro húngarorechaza hablar de plan de paz, su apuesta pasa por hablar primero del alto el fuego y luego de la paz. Pero para hablar de una pausa la exigencia es que Ucrania y Rusia se sienten a hablar. Zelenski responde que hablar de un alto el fuego sin un plan de paz es peligroso, porque será la continuación de la ocupación rusa. "Cualquier cesión a Rusia es inaceptable para Ucrania y un suicido para Europa".
Los líderes siguen debatiendo este viernes con el objetivo de encontrar fórmulas para evitar una Unión con reproducción asistida. Con la mayoría de líderes trabajando para amortiguar la vuelta de Donald Trump, y con un líder, Viktor Orban, que no sacó ayer el champán, como había prometido, pero que sí dijo a los periodistas que había celebrado ese triunfo brindando con vodka.
Enrique García
(Sevilla, 1994) Corresponsal en Bruselas, siguiendo y explicando la política comunitaria. Antes, redactor...