Militao desata la preocupación en el Real Madrid: lágrimas y retirada en camilla después de otro gesto preocupante en su rodilla

Jornada aciaga para la enfermería del Real Madrid. Muy rápido han tenido trabajo extra los servicios médicos del club, que ya antes del minuto 20 del enfrentamiento ante Osasuna han tenido que intervenir para tratar a un Rodrygo Goes que ha recaído de sus problemas musculares. Sin embargo, el mayor sobresalto para el Santiago Bernabéu se produjo sólo unos instantes después, cuando los gritos de dolor de Éder Militao desde el suelo presagiaron un grave diagnóstico. El central se llevó rápido la mano a su rodilla y, entre lágrimas, necesitó de una camilla de urgencia para retirarse del campo.

Preocupa sumamente la lesión de un Militao que ya hace un año hizo frente a una rotura de ligamento cruzado. El brasileño volvió a hacer un feo gesto con su articulación e inmediatamente alertó de la gravedad de lo que había sentido. Ante el temor de que pueda repetirse un diagnóstico de tal gravedad, la grada le despidió con una sonora ovación mientras enfilaba el túnel de vestuarios para someterse a los primeros exámenes médicos. Su salida supuso además el debut del canterano Raúl Asencio, poniendo de manifiesto la plaga de lesiones que ha afectado a la parcela defensiva blanca.

Recaída de Rodrygo

Este gran imprevisto se sumó al de Rodrygo Goes en el Santiago Bernabéu. El '11' del Real Madrid volvió a la titularidad este sábado en el partido de LaLiga frente al CA Osasuna, pero su estancia sobre el campo ha sido efímera. El brasileño, que llegó a esta semana entre algodones arrastrando problemas musculares, fue utilizado como revulsivo en el partido ante el AC Milan del martes y, creyéndose recuperado del todo, volvió a conformar el temido tridente en ataque junto a Kylian Mbappé y Vinicius Júnior. Sin embargo, tras unos buenos primeros minutos de llegadas de los blancos, el brasileño volvió a romperse.

Notó molestias Rodrygo pasados los primeros 10 minutos de choque. Sin conocer aún el alcance exacto de esta alarma, el Real Madrid activó su banquillo en busca de una hipotética solución. Y aunque el futbolista trató de prolongar su estancia sobre el verde todo lo posible, la realidad le dio un golpe que le obligó a pedir el cambio. Brahim Díaz le relevó muy pronto, mientras la desolación del brasileño se trasladaba al banquillo.