Sociedad

Investigan la muerte de un padre y su hijo, menor de edad, hallados con signos de violencia en un domicilio incendiado de Arenys de Mar (Barcelona)

Sus cuerpos fueron hallados anoche con signos de violencia en un domicilio de la localidad barcelonesa

Los Mossos investigan la muerte de un padre y un hijo en Arenys de Mar, las víctimas han sido halladas con signos de violencia en el interior de la vivienda después de un incendio. / Enric Fontcuberta (EFE)

Barcelona

Los Mossos d’Esquadra investigan la muerte de un padre y su hijo, de 32 y 15 años respectivamente, en Arenys de Mar (Barcelona). Los agentes han encontrado los cuerpos de las víctimas en su vivienda, con claros signos de violencia, según ha avanzado El País y confirman fuentes de los Mossos a la SER. La Policía catalana ha abierto una investigación para esclarecer las causas de ambas muertes.

La Policía local de Arenys de Mar ha recibido un aviso esta pasada noche informando que podría haber una persona muerta en una casa de Arenys de Mar. Estos han activado a los Mossos para revisar el domicilio, pero al llegar se han encontrado con un incendio en el interior de la vivienda.

Cuando finalmente han podido acceder, han encontrado los cadáveres de dos hombres en su interior. A la espera de que la autopsia confirme oficialmente la identidad de las víctimas, los familiares ya las han reconocido como un padre, de 32 años, y un hijo menor de edad, de 15 años.

Los Mossos investigan la muerte de un padre y un hijo en Arenys de Mar, las víctimas han sido halladas con signos de violencia en el interior de la vivienda después de un incendio.

Los Mossos investigan la muerte de un padre y un hijo en Arenys de Mar, las víctimas han sido halladas con signos de violencia en el interior de la vivienda después de un incendio. / Enric Fontcuberta

Uno de los dos mató al otro, prendió fuego a la casa y se suicidó

El análisis forense deberá aclarar las causas de la muerte, pero según fuentes policiales, todo apunta que uno de los dos mató al otro y posteriormente prendió fuego a la casa y se suicidó. La autopsia deberá confirmar si la causa del fallecimiento de cada uno de ellos son las heridas violentas con las que les han encontrado o la inhalación de humo.

El escenario del crimen se encuentra en una zona residencial acomodada de Arenys de Mar. Se trata de una zona boscosa de casas unifamiliares, que colinda con Caldes de Estrac, pese a pertenecer a la localidad de playa de Arenys de Mar.

Los psicólogos de emergencia también se han activado para atender a la mujer y madre de las víctimas, que finalmente ha tenido que se traslada al hospital por su estado de alteración, según el País.

De confirmarse que fue el padre quien mató al menor, será la tercera agresión en 48 horas en Catalunya. El sábado los Mossos d’Esquadra detuvieron a una mujer de 46 años en Coll de Nargó, en el Pirineo de Lleida, por asesinar a su hija de 6 años. Ese mismo día de madrugada, en Barcelona, en el barrio de la Font d’en Fargues, los Mossos detuvieron también a un hombre de 35 años que apuñaló a su hijo de 11 años, dejándole herido crítico.

En el primer caso, fueron los abuelos maternos quienes avisaron el viernes desde Andorra de la desaparición de madre e hija. Los Mossos encontraron la mañana siguiente primero a la mujer, que tiene problemas de salud mental y era madre soltera, y poco después el cuerpo de la hija. Fuentes de la investigación apuntan que la mujer envenenó con pastillas a la menor.

El segundo caso pasó la madrugada del sábado, a las 4:15h. Los vecinos de un piso del Guinardó alertaron a la policía por los gritos que salía de una vivienda. En el interior estaba un hombre de 35 años, su mujer y sus dos hijos. Según el relato de la madre, el hombre intentó apuñalarla cuando el hijo mayor, de 11 años, salió en su defensa. El padre, con antecedentes psiquiátricos, tráfico de drogas, y que decía oir voces, asestó varias puñaladas a su hijo en torso y piernas. Después saltó desde el balcón. La distancia era de seis metros, de modo que no resultó herido de gravedad y los Mossos d’Esquadra pudieron detenerle in situ. De momento, descartan en ambos casos que se trate de violencia vicaria y lo atribuyen a problemas de salud mental.