La petrolera Shell gana el recurso contra la sentencia que le obligaba a reducir un 45% sus emisiones contaminantes
La Justicia de Países Bajos admite su responsabilidad en el calentamiento global, pero cree que no se le puede exigir un porcentaje concreto de reducción de CO2
Activistas de Greenpeace protestan frente a la sede central de Shell en Londres este pasado mes de julio con un cartel en el que se lee "Nuestro beneficio, tu pérdida" / Handout
Un tribunal de Países Bajos ha anulado la sentencia que en 2021 obligó al gigante petrolero neerlandés Shell a reducir un 45% sus emisiones de CO2 en 2030 en comparación con la cifra registrada en 2019. Una sentencia que en su momento fue considerada un gran triunfo por parte de los activistas medioambientales, que llevó a Shell a trasladar sus oficinas centrales al Reino Unido, y que ahora queda en suspenso al prosperar el recurso presentado por la empresa.
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Según ha argumentado la magistrada Carla Joustra, si bien se reconoce la responsabilidad de Shell como causante de daño medioambiental, considera que "esto no implica que se le pueda aplicar un objetivo de reducción específico del 45%" y argumenta que la empresa tiene potestad en cómo reducir su impacto climático. Avisa además Joustra de que si Shell dejara de vender petróleo y gas el problema no se solucionaría ya que otra empresa llevaría a cabo las mismas actividades contaminantes.
El fallo del tribunal cree que no hay "consenso científico suficiente" sobre el porcentaje específico de reducción de emisiones de gases contaminantes que debe llevar a cabo una empresa concreta y cree que "Shell ya está trabajando en la reducción de sus propias emisiones”. La decisión coincide además en el tiempo con el inicio de la Cumbre del Clima de Bakú, en la que, aunque no se esperan grandes acuerdos, Naciones Unidas ha exigido que se recorten a la mitad las emisiones de combustibles fósiles.
La decisión duele, pero vamos a seguir enfrentándonos a los grandes contaminantes
— Donald Pols, director de la organización ecologista Milieudefensie
Los activistas medioambientales que llevaron ya a Shell ante los tribunales tienen aún la puerta abierta de recurrir a la Corte Suprema de los Países Bajos. Estas organizaciones han denunciado además este año que la compañía ha abierto una veintena de nuevas vías de extracción de gas desde que fue condenada en 2021. Shell por su parte ha argumentado que la cuarta parte de su gasto el pasado año se destinó a actividades con una huella de carbono reducida.
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