Las comunicaciones entre la Confederación del Júcar y los alcaldes afectados por la DANA también desmienten a Mazón
Frente a la falta de comunicación por parte de la Confederación Hidrográfica, denunciada por el president valenciano, los alcaldes confirman las continuas llamadas con el responsable de la institución, Miguel Polo, en unas interlocuciones que salvaron vidas, según los ediles. La CHJ asegura que no recibió una sola llamada de la Generalitat
Los detalles que ponen contra las cuerdas a Mazón
Madrid
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha señalado a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) como responsable de una supuesta falta de información el martes 29 de octubre, cuando sobrevino el desastre. Pero su versión contrasta tanto con el testimonio de los alcaldes implicados, de cualquier partido, como de los correos y datos disponibles, y con la propia legislación de la Generalitat, que delimita con claridad las competencias.
Los alcaldes afectados por el río Magro estuvieron en contacto personalmente y en tiempo real con el presidente de la Confederación Hidrográfica, Miguel Polo. Laura Sáez, alcaldesa del PP en Carlet, dice que el martes 29 de octubre habló con el presidente de la CHJ "por la mañana, por la tarde y por la noche muchísimas veces". "Siempre que le llamé, me cogió el teléfono", añade.
Llamadas que "salvaron vidas"
Y los alcaldes sostienen que esas llamadas permitieron salvar vidas. La alcaldesa del PP relata que gracias a una de esas comunicaciones, alrededor de las 18:30, en la que Miguel Polo le avisó de que iban a aliviar la presa de La Forata para evitar el riesgo de rotura con el consecuente incremento de caudal, consiguió "advertir a los vecinos de la zona del río de que se situaran en las plantas altas a través de la megafonía", en una actuación que posiblemente salvó vidas.
A Carlet también se trasladó mediada la mañana del martes la consejera de Justicia e Interior, responsable de Emergencias, Salomé Pradas, para comprobar la evolución de la crecida en el municipio.
En la localidad de Alzira gobierna Compromís. El alcalde, Alfons Domínguez, dice a la SER que no recibió un solo aviso de la Generalitat. Solo del presidente de la Confederación y de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé.
Con Polo estuvo "todo el día conectado" a través de "llamadas de teléfono o whatsapp" y también recibió "una llamada de Bernabé". Fueron las únicas instituciones públicas que se pusieron en contacto con él.
El presidente de la Confederación, Miguel Polo, también estuvo en contacto entre otros, con el alcalde de Fortaleny, advirtió a un funcionario de Carcaixent porque no pudo localizar al primer edil, y con la comunidad de regantes de La Riola, que agrupa a otros cuatro municipios. No recibió una sola llamada de la Generalitat valenciana, afirman desde la CHJ a la SER.
Las mentiras de Mazón sobre las alertas: no dependían de la Confederación del Júcar, que sí avisó de la rápida crecida del Barranco del Poyo
El seguimiento del Poyo es competencia de la Generalitat
Eso por lo que respecta a los municipios afectados por el río Magro, cuya seguimiento es competencia de la Confederación en caso de avenidas de agua, según el plan especial de inundaciones de la Generalitat, porque ese barranco tiene embalses o presas de laminación.
No sucede lo mismo con el barranco del Poyo, cuyo seguimiento y competencia, al carecer de presas, corresponde a la Generalitat valenciana, según el plan especial de inundaciones del Gobierno valenciano. En barrancos generalmente secos, sin embalses o presas de laminación como el Poyo, el seguimiento corresponde a los Ayuntamientos y servicios desplegados por la Generalitat, y la Confederación se limita a contrastar la información a petición del propio Centro de Coordinación de Emergencias del Gobierno valenciano, según el mismo plan especial de inundaciones de la Generalitat.
Un único sensor en el Poyo
Aun así, la CHJ advirtió a las 12:07 del riesgo de desbordamiento del barranco del Poyo, que posibilitó la alerta hidrológica lanzada a las 12:20 minutos por la Generalitat. La CHJ solo tiene un sensor de nivel en el Poyo, justo en el cruce del barranco con la autovía A3, que no recoge la información aguas abajo, donde confluyen en el Poyo las ramblas dels Cavalls, Gallego y Horteta, que provocaron el martes 29 un incremento del caudal que arrasó la comarca de L’Horta Sud, con los municipios de Paiporta, Picanya, Sedaví, Benetússer, Massanassa, La Torre o Alfafar, entre otros.