Máxima tensión por el Francia - Israel: prohibiciones, dispositivos de seguridad y asaltos que van más allá del fútbol

A veces tenemos que ver cómo el fútbol se ve totalmente condicionado por temas totalmente externos, que es lo que ocurre con el Francia - Israel que se jugará el próximo jueves. Todo lo que acontece con respecto al país de Oriente genera mucha incertidumbre, tensión y reminiscencias de la cruenta guerra que los mantiene enfrentados por Palestina y que tantas víctimas mortales se está cobrando. Lo político salpica el deporte y este encuentro correspondiente a la Nations League está en el punto de mira por la peligrosidad en lo extradeportivo.

De hecho, tal y como ha informó Andrés Onrubia en El Larguero, en el país vecino "no se habla nada del partido. Se habla del dispositivo de seguridad que prepara Francia", y es que este no tendrá precedentes para un choque de la selección francesa de cara a evitar incidentes como los que se vivieron la semana pasada en Ámsterdam con los aficionados del Maccabi de Tel Aviv en el marco del encuentro contra el Ajax, que se saldaron con más de 60 detenciones en altercados entre manifestantes activistas pro Palestina e hinchas israelíes.

Con todo, han sido muchas las medidas que se han puesto encima de la mesa para garantizar que todo vaya bien en la capital de Francia el próximo jueves. El partido "estuvo a un paso de deslocalizarse por temor a desbordamientos pero finalmente la prefectura de París ha mantenido la sede para albergar dicho encuentro", comentó Onrubia, que ha lanzado el dato de que se dará un récord de menos asistencia en la historia de un choque del combinado galo: "Se espera un mínimo jamás registrado en la historia del estadio para un partido de la selección francesa porque únicamente se han vendido 20.000 entradas, el récord son 32.000 en un Francia-Nueva Zelanda en 2003, pero no se espera que haya más aforo de las 20.000 que se han vendido".

Prohibición de banderas, escoltas y autobuses blindados

"Entre las muchas medidas que se han adoptado es la prohibición de exhibir banderas de Palestina. La semana pasada ya en el París Saint-Germain-Atlético, ultras parisinos mostraron una pancarta pidiendo la libertad del país de Oriente Medio y eso ya generó una oleada de críticas por parte de los políticos", explicó el periodista en el programa dirigido por Manu Carreño, así que habrá duras sanciones para quien exhiba distintivos palestinos. Tal es la tensión que hasta las autoridades israelíes han recomendado a sus aficionados que no asistan a ver el partido en directo por su propia seguridad, alegando un incremento del "odio a Israel en Francia".

Sin embargo, Andrés Onrubia ha asegurado que se espera un centenar de hinchas israelíes en el Stade de France, que "estarán siempre escoltados por la policía y viajarán en un autobús blindado para no ser detectados", al igual que su selección, "que está en un hotel cercado en el que solo saldrán para jugar el partido y para entrenarse". Además, para el acceso al estadio también se han desplegado medidas, "los aficionados deberán pasar en el Stade de France por dos anillos de seguridad y será obligatorio también para los periodistas llevar el pasaporte para que sean identificados". "La prefectura, además, ha confirmado que habrá 27 grupos diferentes de policías que velarán, tanto en los aledaños como en el estadio con policía secreta y disfrazada incluso dentro del Stade de France, por la seguridad del partido".

El periodista ha contado un suceso que ocurrió hace unos días, el cual plasma muy bien la tensión que se vive en Francia en estos momentos, y es que "la sede de la Federación Francesa de Fútbol fue asaltada por el grupo 'Stop Genocidio', que se atrincheró durante dos horas en la sede pidiendo la suspensión del encuentro", comentó, aunque dicha acción no ha tenido éxito en sus peticiones y el encuentro se llevará a cabo. Ahora solo queda esperar que puede jugarse sin incidentes, ni dentro ni fuera del terreno de juego, y que solamente se hable de fútbol una vez que todo haya pasado... aunque visto lo visto parece complicado.