Hora 25El análisis de Xavier Vidal-Folch
Opinión

Mazón, un irresponsable

Si no dimite, aunque sea a un plazo prefijado, será su propio pueblo quien le convierta pasear en un infierno

El president de la Generalitat, Carlos Mazón recoge sus papeles tras comparecer en Les Corts durante el pleno de este viernes en el que rinde cuentas de lo que hizo el 29 de octubre y contar cómo va a remodelar la estructura de su gobierno para adaptarla a la reconstrucción. / Biel Aliño (EFE)

Barcelona

Carlos Mazón es un irresponsable. Y cuando uno no asume ya la responsabilidad, sino que la condiciona a un momento indeterminado en que haya resuelto la normalización de su tierra, es que moral e implícitamente se declara incapaz de ejercerla. El presidente valenciano debe dimitir, como decíamos ayer por vez primera en dos semanas largas, y nos contuvimos por respeto a las víctimas, para no crear confusión ni ruido.

En su explicación al Parlament ha echado la carga de la tragedia a todos los demás. Por supuesto, a la brutalidad insólita del temporal y la riada, una buena razón, pero que no puede esgrimirse ante ninguna instancia humana. Al “sistema”, es decir, a todos, a todos por igual, sin recordarnos que el capitán de la nave es su principal responsable. Hacia arriba y abajo, el Gobierno o la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Pero nada de esto explica su ausencia durante el grueso del día 29. Ni su inacción. Nada explica que con iguales instrumentos de entonces, Valencia, y Andalucía, y Cataluña, hayan solventado esta semana temporales (aunque algo menos potentes), sin muertes. El éxito en la dana del Mazón-2, hunde en la miseria la credibilidad del Mazón-1. Y nada explica que en el último gran temporal del gobierno valenciano de izquierdas, él mismo reprendiese a uno de sus dirigentes por llegar tarde al centro de coordinación, lección que ahora se niega a aplicarse a sí mismo. Si no dimite, aunque sea a un plazo prefijado, será su propio pueblo quien le convierta pasear en un infierno; el espejo de su baño quien le atormente; y los juzgados quienes le persigan por sus resultados luctuosos aplicando otras leyes más allá de la política. Hoy, ha empezado a escoger el mal camino.

Xavier Vidal-Folch

Periodista de 'EL PAÍS' donde firma columnas...