Bob Pop se moja sobre la fuga masiva de 'X': "No es un espacio democrático, es un centro comercial"

Madrid

Primero vino The Guardian, luego fue La Vanguardia y posteriormente numerosos usuarios han decidido abandonar la red social de Elon Musk, X, para marcharse a Bluesky o simplemente dejar de escribir sus opiniones en un número determinado de caracteres. El motivo es claro: la desinformación en la plataforma está a la orden del día y el debate supuestamente democrático está intoxicado al demostrarse que el magnate estadounidense (gran baza de la victoria electoral de Donald Trump) ha modificado el algoritmo para bombardear contenido político conservador a los usuarios, lo que facilitó la victoria del republicano.

En este escenario, es normal que muchos medios de comunicación decidan no favorecer a la fábrica de bulos en la que se ha convertido la plataforma. También hay muchos usuarios, en su gran mayoría de sesgo progresista y casi todos periodistas o personalidades de diferentes ámbitos, que se han puesto en guardia para denunciar que se marchan de la red social para no favorecer al empresario estadounidense que estará al frente del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental que ha creado Trump para su segundo mandato.

Aún así, hay otros que opinan que quedarse en la red social es una manera de intentar combatir este ambiente hostil de debate tóxico y desinformación y no caer en el derrotismo. Muchos piensan que irse es asumir una derrota. Bob Pop, por su parte, no lo tiene claro. "Hubo un momento que pensé en dejarlo pero me llamó una amiga a convencerme de que no", cuenta el escritor en Hoy por Hoy.

"He leído cosas de gente muy interesantes asumiendo la marcha de Twitter como una especie de derrota, pero luego otra gente de la que confio mucho como 'Proyecto Una' ha hablado de la cosa épica esta que ha salido de quedarse en Twitter que resulta ridícula, porque como ellos bien explican no es un espacio democrático, sino un centro comercial", ha reflexionado el colaborador del programa de Àngels Barceló, que asegura que lo que quiere Musk es "vendernos cosas".

"Yo he leído esta mañana un argumento de que no se puede abandonar la plaza pública porque sino se privatiza, pero es que creo que ya está privatizada", ha apuntado Àngels, que no utiliza la red social desde el año 2021. "Tiene un propietario muy chungo", ha añadido Bob, que piensa que igual como sociedad democrática "tenemos la sensación de que podemos 'hackear' el poder".

"No vayamos trabajando con el derrotismo, si seguimos pensando que los poderosos chungos son omnipotentes, no tenemos resquicio para hacer nada por nuestra parte, quedémonos con algo de esperanza y resistencia. Sin épicas, yo sigo en Twitter y en Bluesky, y sigo en la vida y tomando café con gente, un poco de todo", ha reflexionado el guionista en el programa de la Cadena SER.