Sociedad

Cajetillas genéricas y nada de dispositivos con sabor a fruta: el real decreto de Sanidad para luchar contra el tabaquismo

El ministerio de Sanidad saca a audiencia pública el texto legal que pretende implantar las cajetillas neutras en España y que va a desterrar los dispositivos con sabores atractivos: sólo van a poder contener "ingredientes aromatizantes o saborizantes que confieran al producto final aromas y/o sabores a tabaco".

Los jóvenes se inician en el consumo de tabaco utilizando vapeadores / Cadena SER

MADRID

Como si de la Hidra de Lerna se tratara, la industria tabacalera ha ido multiplicando sus cabezas, sus productos, para mantenerse fuerte y viva a pesar de las restricciones al tabaco tradicional: cigarrillos electrónicos, dispositivos desechables con sabores como sandía o fresa y la última moda entre los jóvenes, las bolsas de nicotina, que se colocan entre el labio superior y la encía. El ministerio de Sanidad acaba de sacar a audiencia pública el texto legal con el que pretende regular esta proliferación de productos que las empresas han sabido promocionar con una imagen alejada del tabaco tradicional pero que, sin embargo, contienen, en la mayoría de los casos, nicotina, y no están exentos de riesgos. Estas son las principales medidas que plantea Sanidad en el todavía proyecto de Real Decreto.

Cajetillas genéricas o neutras para los cigarrillos y el tabaco de liar

Es uno de los aspectos "más destacados" del proyecto, según la ministra Mónica García, que defiende que "hará que todas las cajetillas sean iguales y esto no es un capricho, hay evidencia científica más que de sobra que habla de que esa publicidad añadida es perjudicial". El texto plantea que todos los embalajes y envasados de cigarrillos y tabaco de liar tengan un "tono de color único" que será fijado por orden ministerial. Las empresas van a poder elegir entre dos tonos para "el interior de la unidad de envasado y del embalaje exterior". Además, el plástico que recubre las cajetillas tendrá que ser "claro, transparente e incoloro", desprovisto de cualquier marca y hasta se va a unificar la tira de rasgado que se utiliza para abrir esa envoltura.

Se acabó "vender veneno con sabor a fresa"

El proyecto que ha hecho público el ministerio de Sanidad regula también la composición de los cigarrillos electrónicos con o sin nicotina -los conocidos como vapeadores-. Sólo van a poder contener "ingredientes aromatizantes o saborizantes que confieran al producto final aromas y/o sabores a tabaco”. Para Mónica García, que ha inaugurado la presentación de una campaña, precisamente, para alejar a los jóvenes del tabaquismo y estos productos, el texto "prohíbe los productos aromatizantes que son veneno con sabor a fresa, te vamos a vender veneno con sabor a fresa. Pues no. Que esté regulado y que sepas que lo que estás tomando son tóxicos y tienen su efecto en la salud".

Un tope a las bolsas de nicotina, la última moda relacionada con el tabaco

Se colocan bajo el labio superior, entre éste y la encía, y según Sanidad su consumo se ha disparado entre los jóvenes en España: son las bolsas de nicotina, que el proyecto de Real Decreto define como "un producto para uso oral sin tabaco, compuesto total o parcialmente por nicotina sintética o natural, mezclada con fibras vegetales o un sustrato equivalente, y presentado en forma de polvo, fibras, partículas o pasta, o una combinación de estas formas, en sobres monodosis, en sobres porosos, comprimidos o en forma equivalente, sin estar destinados a fumarse". El ministerio plantea limitar la cantidad de nicotina que podrán contener estas bolsas a 0,99 mg por sobre, y prohíbe que contengan "cafeína, taurina, CBD u otros aditivos y estimulantes asociados a la energía o relajación" y, de nuevo, que sepan a algo que no sea tabaco.

Un año de prórroga para la venta

Tal y como está redactado, el proyecto de Sanidad, todavía en fase de audiencia pública, entraría en vigor al día siguiente de su publicación en el BOE, una vez aprobado. Pero contempla una prórroga de doce meses para la comercialización de los productos afectados, es decir, que todavía vamos a encontrarlos a la venta durante un año más a partir de la entrada en vigor del Real Decreto.