¿Las cumbres del clima también son ecopostureo?
Los "ministros" de ciencia y tecnología del 'Hoy por Hoy' analizan el ecopostureo tras la ineficacia sistemática de las cumbres del clima
¿Las cumbres climáticas también son ecopostureo?
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Madrid
El ecopostureo ha sido uno de los temas tratados hoy por los "ministros" de ciencia y tecnología del Hoy por Hoy: primero, por la inefectividad de las grandes cumbres del clima (y en realidad, de todas las cumbres: tampoco la del G20 parece capaz, no ya de resolver, siquiera de atacar, ninguno de los grandes problemas ambientales que hay sobre la mesa del mundo. Esta última cumbre parece que acabará sin acuerdo, y discutiendo sobre dónde se celebrará la siguiente, si en Turquía o en Australia, cosa que sería un buen negocio para los aviones privados, como ironiza Jaime García Cantero.
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¿Tienen sentido las cumbres hoy en día? Como explica García Cantero, eso equivale a preguntarse si tiene sentido la multilateralidad en un mundo tan polarizado como este, donde la incapacidad de llegar a acuerdos es manifiesta. En la COP probablemente no se llegue ni a un acuerdo de mínimos, no se hablará de cifras, todo quedará en palabras muy etéreas. Y a esto se suman informaciones sobre los jets privados, las paseos en yate, los campos de golf y otras actividades de ocio paralelas que se ofrecen en estas cumbres, mientras los países pobres, como recuerda Nuño Domínguez, dan testimonio de lo que el cambio climático les supone desde el punto de vista económico, social y en términos de vidas humanas, y mendigan fondos para superar el desafío. Dentro, además, de una cobertura mediática cada vez más menguante. El sistema de cumbres, si no está roto, amenaza con romperse.
Por si fueran pocas, una amenaza más se cierne sobre el equilibrio del clima: el nombramiento en Estados Unidos de un negacionista climático y ex directivo de una petrolera, Chris Wright, como Secretario de Energía. Además, la oficina (externa a la propia administración) que dirigirá Elon Musk, para recortar la "burocracia" y el cuerpo de funcionarios estatal, también pretende eliminar las regulaciones ambientales que afectan a algunas de sus empresas, como Space X o Tesla. El Proyecto 2025, redactado por un think tank de ultraderecha y que, en campaña, Trump decía desconocer, describe en realidad punto por punto cómo ir desmontando la capacidad que tiene el estado de resistirse a la desregulación.
Jaime García Cantero estuvo en un evento en Madrid con un buen amigo de Musk, Peter Diamandis, CEO de Singularity University y multimillonario inversor en las llamadas "tecnologías exponenciales". Diamandis no oculta su entusiasmo por el nuevo escenario desregulador: "Yo digo que empiezan los alegres años veinte. Vamos a ver progresos enormes en tecnologías espaciales, en robótica, en conducción autónoma, en biotecnología... Estas empresas van a avanzar a la velocidad del rayo y personalmente estoy muy emocionado. Son las tecnologías que van a incrementar nuestro nivel de vida y generar prosperidad". Claro, generarán prosperidad para quienes invierten en ellas, puesto que no hay ningún dato que avale que estas industrias estén generando mayor equidad: resulta evidente que inciden en que haya más desigualdad y no menos. Tampoco parece preocupado porque, históricamente, a los "felices años veinte" siguieran los no tan felices 30 y 40.
Primer juicio por "greenwashing"
Volviendo al tema del ecopostureo, el "ministerio" ha explicado las razones que están enfrentando en un tribunal de Santander a Iberdrola contra Repsol por competencia desleal y publicidad engañosa, en lo que es el primer juicio por greenwashing. La palabra viene de whitewashing, que significa encalar o pintar de blanco para disimular imperfecciones. Cuando te pintas de verde, en cambio, estás haciendo ver que eres ecológica cuando en realidad sigues siendo una empresa contaminante cuyas fuentes de ingresos siguen siendo las mismas. Y de eso es de lo que Iberdrola (una eléctrica) acusa a Repsol (una petrolera). Como explica Nuño "Repsol dice que es líder en transición energética, cosa que motiva que Iberdrola la denuncie en los tribunales. Esto es inaudito en España".
Uno de los problemas del juicio es que la normativa europea sobre greenwashing no está muy desarrollada, pero, por otro lado, será interesante porque el juicio obligará a hacer pública información sobre ambas empresas. "Estaría bien que el consumidor supiera, por ejemplo, cuánto del negocio de estas empresas viene de los combustibles fósiles y cuánto viene de las renovables. ¿Cuánta de la energía que consumo en mi hogar es renovable? Pero este debate en realidad se aplica a toda la publicidad: si la mitad de los anuncios fueran verdad, los problemas del mundo estarían solucionados", comenta Nuño.
El trasfondo del conflicto judicial que enfrenta a Iberdrola y Repsol es que la electrificación es el vector fundamental para la transición energética. "Y, claro, las eléctricas están mejor preparadas para eso, pero las petroleras no quieren dejar de subirse a ese carro. El tema, claramente, es levantar zanjas para que no entren en tu mercado estos señores", explica Jaime. Que añade que, como ha contado el diario Cinco Días, Repsol ha dicho en sus argumentos "nosotros somos líderes en transición energética, pero en el mundo de los hidrocarburos, nos referimos a eso. No parece que vaya a dar mucho de sí esta defensa. Los 'peros' y los asteriscos en este tipo de publicidad son muy divertidos". Los nuevos anuncios de Cepsa, con su cambio de nombre a Moeve y su cariñosa despedida de los dinosaurios, forman parte de este movimiento. ¿Un movimiento hacia una verdadera transición energética, o un ecopostureo cada vez más sofisticado?
Eva Cruz
Redactora en el magazine de 'Hoy por Hoy' desde 2017.