Reino Unido contempla dar dinero a personas sin techo para reducir la pobreza
El Gobierno ha puesto en marcha un estudio para comprobar la viabilidad del proyecto
Madrid
Reino Unido ha decidido escuchar a los activistas contra la pobreza del país, que han creído durante mucho tiempo que la forma más rentable de ayudar a las personas sin techo es haciendo transferencias en efectivo, pero no de forma directa. Por ello, el Ejecutivo británico presidido por Keir Starmer ha decidido poner en marcha un nuevo estudio dirigido por el King's College de Londres (KCL) y la organización benéfica para personas sin hogar Greater Change, para ver la viabilidad del proyecto y, después, poder implementarlo como una forma eficaz de reducir la pobreza en el país. Que ahora mismo es el que más personas sin hogar tiene de la OCDE.
Esta nueva investigación, financiada por el gobierno británico, reunirá a 360 personas de Inglaterra y Gales. La mitad recibirá ayuda de organizaciones benéficas, y la otra recibirá una ayuda adicional por parte de Greater Change, cuyos trabajadores hablarán con estas personas para conocer de primera mano en qué tipo de situación se encuentran y pagar depósitos de alquiler, deudas pendientes, equipos de trabajo, electrodomésticos, muebles o ropa nueva. Todo ello, sin realizar transferencias directas a cada persona, para prevenir que ese dinero no acabe en otro tipo de cosas y que la ayuda esté 100 % destinada a bienes de primera necesidad.
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En el Reino Unido se han llevado a cabo estudios de este tipo, pero mucho más pequeños. En 2012, por ejemplo, la Fundación Joseph Rowntree ayudó a 12 personas sin techo. Aunque este es el primero a gran escala, y según ha asegurado el cofundador de Greater Change, Jonathan Tan, en declaraciones para The Guardian, cada persona a la que ayudan podría suponer alrededor de 35.000 libras en gasto público. El problema de las personas sin hogar en Reino Unido está muy ligado a la reinserción de los presos que salen de prisión.
Según datos del Gobierno, el 13 % de las personas que salen de la cárcel se quedan sin hogar después de ser liberados, algo que aumenta las probabilidades de que reincidan en conductas delictivas. En 2022, la tasa de reincidencia estuvo por encima del 30 % en Inglaterra y Gales. Según la organización benéfica, el 86 % de las personas a las que ayudan a salir de la calle no lo están un año después, y este estudio busca comprobar si esto se debe a que, desde la organización, ayudan a las personas que menos lo necesitan.