¿Son los inspectores de Hacienda tan feos y aterradores como los pintan?
Charlamos con Pablo Miser, el Inspector de Hacienda que asesoró a los guionistas de la serie de Movistar Plus
Así es el trabajo de un Inspector de Hacienda
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Madrid / Torremolinos
Celeste es una cantante latinoamericana que se enamora de un español y a la que Hacienda investiga por no declarar impuestos bajo la excusa de que no reside en nuestro país. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Carmen Machi es una Inspectora de Hacienda con poca vida social que va sembrando el terror con su carnet profesional. A punto de jubilarse, no puede resistirse a “pillar” a un rico más de esos a los que no les gusta pagar impuestos ¿El parecido con la realidad es coincidencia?
Durante varios meses Pablo Miser le contó los pormenores de su trabajo al guionista de la serie. “En general se muestra bastante bien lo que hacemos, aunque se han tomado algunas licencias narrativas para que el argumento no sea tan aburrido como es en realidad nuestro trabajo.” Si nos atenemos a la serie Pablo sería un intrépido investigador que acude a peluquerías, gimnasios, tiendas, restaurantes a solicitar los registros de sus clientes bajo la amenaza de enviarles una inspección. Que se lee la prensa rosa y asalta paparazzi para conseguir información. La aventura real se desarrolla en una oficina de seguridad, delante de un ordenador capado para evitar que se descarguen datos sensibles, donde se repasan documentos, páginas Excel llenas de números y donde se contrastan los datos que les requieren a otras instituciones incluso en el extranjero “Mis hijas me dicen que mi trabajo es muy aburrido”. No tanto. Los casos que él lleva son muy complejos, los de grandes fortunas y oligarcas que se compran casas que nos cuesta imaginar, que gastan a manos llenas en caprichos que el resto de los mortales jamás disfrutaremos, pero que a la hora de aportar a las arcas del Estado prefieren guardar su dinero en paraísos fiscales.
Estos casos no se investigan de oficio. Previamente y a través de comprobaciones masivas de Gestión, el Departamento de Planificación y Selección les envía los expedientes sospechosos y es entonces cuando empieza su trabajo que, por Ley, no puede durar más de 18 meses. Nunca se generará empatía con el contribuyente porque sus contactos son exclusivamente con sus asesores que intentan siempre rebajar la valoración de la deuda. En ocasiones, estos consejeros son antiguos Inspectores de Hacienda que “se han pasado al lado oscuro” y ahora trabajan para carísimos despachos de abogados poniendo a su servicio lo aprendido en la Agencia Tributaria.
Si hay delito, el asunto pasa a la Fiscalía y empieza la negociación para llegar a un acuerdo. ¿Por qué tiene que haber un acuerdo con los ricos? ¿Por qué no paga la multa como cualquier otro contribuyente? “Nosotros nunca negociamos una sanción. Se convierte en delito a partir de una deuda de más de 120 mil euros de cuota y si es así nosotros ya no pintamos nada, aunque la deuda la pagan íntegra.” Lo que se negocia es la multa y suele llegarse a un acuerdo para asegurarse el cobro. Por ejemplo, en el caso de Shakira, Hacienda le reclamaba una multa de más de 20 millones por un fraude de 14. Al final, para no ir a la cárcel, llegó a un acuerdo por el que pagó 7’3 millones de multa.
En “Celeste” no solo se retrata un trabajo, también una forma de vida. Y aquí encontramos luces y sombras. Es verdad que caen mal y que a la gente le cambia la cara cuando les dicen a qué se dedican. “Hay una especie de odio generalizado hacia nosotros.” Es posible que esta sea la parte del Sistema en la que cae peor el que hace cumplir la Ley que el que la infringe. Esto genera una especie de endogamia en la que abundan las relaciones entre compañeros. Pero, y aquí se pone serio Pablo, “quiero desmentir que todos los Inspectores de Hacienda seamos feos, tengamos cara de amargados o estemos calvos. En nuestra oficina hay de todo y esa imagen sí que nos ha molestado” … Si yo fuera Diego San José me inquietaría tener cabreados a los 1500 Inspectores que hay en España, no vaya a ser que un día le llegue una de esas cartas que la gente teme más que a un bulto en la ingle.
Paqui Ramos
Casi siempre en la radio. Siempre en la SER. Trabajando con Javier del Pino y yendo a sitios con Juanjo...