Lleva toda su vida ayudando a mujeres maltratadas y se rompe cuando Francino le pregunta por el dinero público: "Es muy duro"

Madrid

El 25 de noviembre es el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, un día para reivindicar la condena social a la violencia machista y rendir tributo a las mujeres que han sufrido este tipo de violencia por parte de un hombre durante su vida. Por ello, a los actos del 25N en todas las ciudades se ha sumado un programa especial de La Ventana en el que el equipo de Carles Francino se ha desplazado al Centro de Reinserción de Mujeres Maltratadas para conocer cómo trabajan estas profesionales que dedican su vida a trabajar en la recuperación de mujeres que han sufrido violencia de género.

El centro cuenta cada vez con menos recursos económicos debido al recorte de subvenciones. La asociación se encuentra actualmente en un momento de asfixia económica muy preocupante después de que el pasado mes de junio 12 mujeres del centro tuvieron que ser derivadas a otros lugares en mitad de su proceso de recuperación porque no habia recursos para mantenerlas. La situación en el centro, afortunadamente, ha mejorado un poco, con 4 mujeres siendo atendidas en estos instantes y una lista de 20 más esperando.

La directora del Centro de Recuperación de Mujeres Maltratadas, Juani Aguilar, denuncia en La Ventana, que desde el 2017, cuando se repartió la gestión de estos centros entre el Estado y la Comunidad de Madrid, han sufrido un recorte progresivo de las subvenciones. "En los ultimos años ha sido una asfixia absoluta", indica, agradeciendoa a todo su equipo el trabajo de todos estos años en condiciones muy precarias. "Sin ellas hubiera sido complicado mantener esto a flote. Ha habido meses muy difíciles sin un mal gesto ni una mala cara, todo remar a favor", ha comentado, adelantando su esperanza por un compromiso con el ministerio de Igualdad "casi finalizado" que podría llevar a un posible convenio, aunque "se necesitan más recursos", apunta.

Aguilar no ha podido evitar las lágrimas cuando Francino le ha preguntado cómo es el momento en el que tienen que comunicarle a una mujer que, por la falta de recursos del centro, tiene que seguir su tratamiento en otro sitio. "Cuesta, cuesta mucho. Al fin y al cabo son mujeres que llegan aquí con una perspectiva de futuro, un cambio y un renacer. Nosotras creemos en este recurso, lo hemos demostrado en nuestros 33 años trabajando. Hemos ayudado a casi 900 mujeres y 1000 menores, con una recuperación del 75%. Queda reflejado que el recurso merece la pena, solamente una vida merece la pena, da igual el dinero que sea", ha sentenciado la trabajadora social.

"Cada vez que una mujer sale por la puerta con la capacidad suficiente de ser autónoma e independiente, para nosotras es un logro infinito, pero el trabajo es de ellas", ha comentado la directora del centro, que reconoce que el momento de derivar a las 12 mujeres en junio fue "muy duro" y ha contado cómo lo afrontaron. "Hay que poner la verdad encima de la mesa, mentir no lleva a nada, más que a la confusión y a crear falsas expectativas. Fuimos sinceras con ellas. Hay que decir que muchas mujeres estaban ya en un proceso casi de salida del programa, no acababan de llegar, lo que amortigua esa salida tan traumática, es muy dificil", ha sentenciado en La Ventana.