"Empieza a sobrar mucho jefe de gabinete": Urrea asegura que han cobrado un protagonismo que no es propio de la figura

El caso de Juan Lobato, secretario general del PSOE en Madrid, continúa generando controversia dentro y fuera del Partido Socialista. Tras registrar ante un notario mensajes relacionados con el presunto fraude fiscal de la pareja de Isabel Díaz Ayuso, Lobato ha rechazado dimitir y ha calificado las críticas internas como un «linchamiento». Los sectores críticos exigen su salida antes del Congreso Federal de Sevilla. La dirección nacional ha optado por mantenerse al margen y dejar que el PSOE-M gestione el asunto. Este tema fue analizado en «El Abierto» de Hoy por Hoy, donde los tertulianos Mariola Urrea, Víctor Lapuente y Elisa de la Nuez reflexionaron sobre el caso y el rol de los jefes de gabinete en la política española. Mariola Urrea ha criticado la creciente influencia de los jefes de gabinete en la política. «Empieza a sobrar mucho jefe de gabinete. Últimamente, ya sea en Madrid, en Moncloa o en otros lugares de España, los jefes de gabinete están cobrando un protagonismo que no les corresponde», ha señalado. Urrea ha subrayado que su rol debería limitarse a coordinar tareas administrativas y no políticas. La analista ha hecho un llamamiento a que en este país «hay que poner atención a los perfiles de los jefes de gabinete». Sobre Lobato, ha destacado que, el ruido generado ha provocado que «hace unos días no lo conocían ni en Madrid y hoy lo conocen en toda España, lo que ha fortalecido su liderazgo». Sin embargo, ha calificado como «deslealtad» su decisión de acudir a un notario, lo que, en su opinión, ha erosionado aún más la confianza dentro del partido. Víctor Lapuente ha centrado su análisis en el papel de los jefes de gabinete y su impacto en la gobernabilidad. «¿Qué contribuyen los jefes de gabinete a la gobernabilidad de una institución? ¿Es necesario tener un ejército de soldados filtrando documentos para dañar a oponentes políticos?», ha cuestionado. Lapuente ha criticado que miembros de gabinetes gubernamentales utilicen herramientas como mensajes de WhatsApp para influir en dinámicas partidistas, calificando estas prácticas como «ni bonitas ni elegantes». En cuanto a Lobato, ha expresado: «Siento debilidad por personajes como Lobato; soy leal a los traidores siempre y cuando se muevan por una meta noble». No obstante, ha concluido que el líder madrileño se encuentra «en un lugar solitario, ni héroe ni villano, preso y víctima de la confianza dentro del partido». Por su parte, Elisa de la Nuez ha destacado la creciente confusión entre las responsabilidades de los partidos políticos y los altos cargos de gobierno. «Es cada vez más común que las cuentas institucionales en redes sociales se parezcan más a cuentas de partidos, actuando más como políticos que como representantes institucionales», ha afirmado. Además, ha señalado que esta mezcla de roles dificulta la separación entre las funciones del partido y del gobierno, algo que, en su opinión, es una de las causas de la desconfianza entre Lobato y la dirección del PSOE. Finalmente, ha abogado por el respeto a los estatutos internos como vía para superar las divisiones internas.

"Empieza a sobrar mucho jefe de gabinete": Urrea asegura que han cobrado un protagonismo que no es propio de la figura

La analista de Hoy por Hoy destaca que este cargo público debería limitarse a coordinar tareas administrativas y no políticas

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