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Un empresario se come el polémico plátano pegado a la pared que compró por 6,2 millones de dólares: "Es mucho mejor"

El emprendedor chino Justin Sun considera la obra de arte 'Comedian' un "fenómeno cultural"

La obra de Maurizio Cattelan, "Comedian", que se vendió por 6,4 millones de dólares. / John Nacion

La obra de Maurizio Cattelan, "Comedian", que se vendió por 6,4 millones de dólares.

Madrid

No es de extrañar que algunas personas millonarias cometan verdaderas excentricidades dada su posición. Comprar cosas exclusivas, gastarse altas cantidades en coches o joyas de lujo o, incluso, adquirir piezas únicas de arte. Justin Sun es uno de esos millonarios que ha decidido gastarse 6,2 millones de dólares en una obra un tanto peculiar y lo que ha hecho con ella es más destacable aún. Este empresario, nacido en China, fue el comprador de Comedian, la banana pegada a la pared que dividió al mundo del arte en 2019, ideada por el artista conceptual Maurizio Cattelan en la feria Art Basel de Miami, y que fue subastada recientemente por 6,2 millones de dólares en la casa Sotheby’s de Nueva York.

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Sun es un emprendedor chino de criptomonedas que, tras comprar la obra, recibió junto a la pieza de fruta y la cinta adhesiva que la sostiene en la pared, un certificado de autenticidad de la banana, que tenía que reponerse más o menos cada siete días (según las recomendaciones del propio artista y de la casa de subastas). Desde el primer momento, el empresario demostró que no iba a actuar como otros compradores que generalmente prefieren mantenerse en el anonimato. Él se identificó e incluso ya adelantó lo que pensaba hacer con la obra, algo que ahora ha cumplido.

"Esto no es solo una obra de arte; representa un fenómeno cultural, un puente entre los mundos del arte, los memes y la comunidad cripto. Además, en los próximos días voy a comerme personalmente la banana como parte de esa experiencia artística única, honrando así su lugar en la historia del arte y la cultura popular", concluyó con un mensaje en su cuenta de X.

Y así ha sido, pocos días después de la adquisición, que le costó 6,2 millones de dólares se la ha comido. Sun, de 34 años, se ha presentado ante las cámaras y se ha comido la banana. El empresario ha lucido muy sonriente en un hotel de Hong Kong, donde estaba la cuestionada obra.

Tras comerse el plátano, el empresario ha afirmado que está "realmente muy bueno". "Es mucho mejor que otros", ha añadido. Desde que el artista se convirtió con esta pieza en fenómeno en 2019 no es la primera vez que alguien se come la banana. Otras dos personas hicieron previamente lo mismo.

 
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