Está a punto de cumplir 23 años y su carrera profesional está en un momento de ascenso imparable. Fue en julio de 2022 cuando estrenó su Quevedo: BZRP Music Sessions, Vol. 52, la sesión con el productor argentino Bizarrap, que ocupó los primeros puestos en varias listas musicales y, desde entonces, ha ido sumando éxito tras éxito. Ahora el artista canario Quevedo está de estreno con Buenas noches, su último disco que presentó el pasado noviembre y que ya acumula miles de reproducciones en diferentes plataformas. Sin embargo, detrás de su faceta como artista internacional, existe un chico veinteañero que no quiere perderse ningún momento de su juventud. Quevedo es una estrella de la música urbana y, aunque podría permitírselo dada su posición, prefiere no vivir de momento como otros de sus compañeros de profesión. Él, por ejemplo, está encantando con compartir piso, como hacen muchos otros chicos de su edad. De hecho, él vive con sus amigos. «Creo que no me gustaría quemar etapas de mi vida personal antes de vivir experiencias que la gente de mi edad debe vivir», ha explicado el artista a Aimar Bretos durante su entrevista en Hora 25. Según ha confesado, a él le gusta compartir piso para estar cerca de sus amigos y así «compartir momentos con ellos». «A cualquiera de mi edad le corresponde vivir eso y no quiero saltarme momentos. Tengo miedo a volverme loco, es lo que más miedo me da, dejar de ser yo», ha añadido el canario. Él considera que es muy importante cuidarse para estar bien, tanto a nivel mental como a nivel físico, comiendo bien y haciendo deporte, además, es clave en su vida el priorizar las cosas consideradas importantes. «No siempre lo consigo, no soy perfecto pero intento hacer cosas bien. Intento mantenerme enfocado y eso me ayuda a pasar este momento bueno», ha añadido. Sobre más momentos de su vida, Quevedo ha admitido que él cuando viaja a su isla, Gran Canaria, también busca seguir siendo el chico normal que era antes de convertirse en famoso. De hecho, él se queda en casa de sus padres e intenta ir a los mismos sitios a los que iba años atrás. Uno de estos lugares es la playa. Reconoce que no va a las que están muy aglomeradas, pero sigue yendo a otras y se ha dado cuenta de que la gente es cada vez más respetuosa y le dan su espacio. «Agradezco que me dejen hacer vida normal», ha afirmado. Aunque eso no sucede en todos los sitios. En este sentido, Quevedo confiesa que en este tiempo ha tenido que renunciar a una de las cosas que más le gustaba hacer que es ir andando a los sitios. Admite que antes iba andando de su casa a otros lugares, pero ahora no puede hacerlo si no va camuflado con gorra o gafas de sol para pasar desapercibido. Esto, admite, le da pena porque es algo que le encantaba hacer. «Ahora lo he perdido», lamenta, a pesar de que su carrera le ha dado otras cosas buenas que también agradece. Lo que Quevedo tiene claro es que el éxito es mucho mejor si es compartido con los suyos, por eso, a pesar de que en estos años ha conocido a muchas personas, siempre se imagina volviendo a su tierra para celebrar todo lo bueno que le pasa. «Me imagino salir por allí con amigos, que se escuchen en la calle, me imagino bailando las canciones en discoteca allí», ha dicho en referencia a su isla. «Es mi casa», ha concluido.