Un 'tiempo muerto' nunca salió tan caro: Utah no consigue la victoria ante los Lakers... por su entrenador

El Delta Center de Salt Lake vivió el domingo por la noche un acción que no se suele ver de manera recurrente. El partido entre Utah Jazz y Lakers se resolvió de la manera más inesperada. El equipo de Los Ángeles acumula ya varios encuentros en los que resuelve, pero no deja grandes sensaciones en la cancha. En esta ocasión, la fortuna se alió con el equipo de LeBron James.

Los Lakers salvaron el día, por un 104-105 a su favor. En caso de haber caído, la crisis se hubiese confirmado. En realidad, Utah, personificado en su entrenador, le hizo un regalo anticipado por Navidad a los angelinos. Los Jazz tampoco están 'para tirar cohetes', y solo suman cuatro victorias en los veinte partidos disputados.

Ambas franquicias necesitaban sumar la victoria y Will Hardy, entrenador de Utah, se encargó de ello. Los Ángeles Lakers evitaron un intento de remontada de los Jazz que casi se hace realidad. Los Lakers afrontaron los últimos cinco minutos con siete tantos de ventaja. LeBron se puso el modo de trabajo, tanto en ataque como en defensa. Un choque que fue pareja prácticamente en los cuatro cuartos y que se zanjó a falta de segundos para el final.

En el marcador, los Lakers se imponían por un punto a los Jazz, quien tenían la última posesión. Collin Sexton superaba la línea del medio del campo, driblaba a los rivales y realizaba una bandeja que suponía la remontada de los locales. Sin embargo, estos dos puntos nunca llegaron a subir al marcador, pues décimas de segundo antes de que el balón entrase en la canasta, su entrenador, Hardy, solicitó tiempo muerto pues sus jugadores no conseguían ventaja en transición. Sin duda, una petición que resultó muy muy cara para el equipo de Utah y que propició la victoria de los Lakers en cancha rival.