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Fútbol

Mojica, fuera de sí tras provocar el penalti de Raphinha: la toma con Morlanes y llega a darle un cabezazo

El lateral colombiano ha provocado el penalti sobre Lamine Yamal que ha terminado en el 1-2 del Barça

Mojica, muy enfadado con Morlanes, antes del gol de Raphinha en el RCD Mallorca - FC Barcelona / Captura de X

El FC Barcelona ha empezado su remontada ante el Mallorca en la segunda mitad gracias a un gol de penalti de Raphinha. El brasileño ha definido con confianza, abajo y a la izquierda de Leo Román para colocar el 1-2 en el marcador. Ese penalti ha sido provocado por Johan Mojica que, en su carrera tras Lamine Yamal, ha tumbado al joven jugador del Barça cuando este se disponía a rematar a puerta después de un buen desmarque a la espalda. Gil Manzano no ha tenido dudas y ha señalado pena máxima desde el primer momento.

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Sin embargo, lo que más ha sorprendido de toda la secuencia del penalti ha sido la reacción de Mojica que, tras causar el penalti él mismo, se ha desatado y ha cargado, visiblemente enfadado, contra algunos de sus compañeros por permitir que el balón llegase a las botas de Lamine. Su principal víctima ha sido el centrocampista Manu Morlanes. Mojica se ha acercado a él con gestos agresivos y gritos y ha llegado a darle un cabezazo al chocar contra él. Su compañero le ha recriminado el gesto, pero Mojica estaba totalmente fuera de sí y Morlanes se ha llevado otro empujón antes de escaparse.

Lo cierto es que el partido del lateral colombiano no está siendo el mejor, después de que los dos goles del FC Barcelona hayan llegado por su banda. En el primer tanto, un rocambolesco tanto de Ferrán Torres, la jugada de ataque también ha llegado por su banda, tras un desmarque de Dani Olmo que, tras un par de rebotes, ha empujado el '7' prácticamente a puerta vacía.

La principal clave del penalti, como ha explicado el exárbitro Iturralde González en 'Carrusel Deportivo', no es si debe pitarse o no la pena máxima, sino el color de la tarjeta con la que debería haber sido sancionado el propio Mojica. Y es que, si se considera que el lateral no tenía en ningún momento la posibilidad de pelear el balón, la tarjeta correcta sería la roja. Gil Manzano mostró la amarilla en directo y, por ello, Mojica pudo seguir en el campo. Al menos lo suficiente como para echarle una buena bronca a Morlanes.

En los minutos posteriores a ese penalti, la cara del partido cambió completamente. El Barça encontró todas las ocasiones que había malgastado en la primera mitad y empujó hasta conseguir una abultada goleada (1-5). En diez minutos, Raphinha, Frenkie de Jong y Pau Víctor culminaron la goleada con un juego excelso de Lamine, que volvió a cargar la banda derecha de peligro con sus regates y pases al hueco.