La policía detiene a varios líderes opositores de Georgia y cierra las tiendas donde los manifestantes pueden comprar material de protección
Más de 300 personas han sido detenidas en una semana de protestas en la calle por la victoria de un partido prorruso en unas elecciones bajo sospecha para buena parte de la comunidad internacional
La policía de Georgia ha detenido a Nika Gvaramia, líder de un partido opositor y proeuropeísta, quien participaba en las protestas que desde hace días se están produciendo en Tiflis y otras ciudades del país por las supuestas irregularidades en las elecciones. En esos comicios ha vencido un partido prorruso y partidario de restringir las libertades civiles así como de congelar la entrada del país en la Unión Europea.
El propio partido de Gvaramia ha denunciado que ha sido golpeado y detenido durante una redada, de hecho ha llegado a alertar de que el dirigente estaba inconsciente en el momento de su arresto. Gvaramia fue ministro de Educación y también de Justicia y es además conocido por fundar una cadena de televisión. Otros activistas están denunciando en redes sociales que este miércoles se han producido más arrestos de personas que están participando en las manifestaciones.
Gvaramia lidera el partido Ahali, una formación de centro de corte proeuropeo fundada este mismo año y que había obtenido 10 de los 150 escaños en las elecciones formando parte de la gran coalición de partidos que se enfrentaron a Sueño Georgiano, la formación en el gobierno vinculada a los intereses de Rusia.
También durante las protestas de hoy la policía ha detenido a dos dirigentes de Georgia Fuerte, un partido socialdemócrata que obtuvo 14 escaños en las elecciones. Según ha denunciado esta formación, los dos políticos han sido acusados de incitar los disturbios en las calles. Reacción policial que llega después de la amenaza del primer ministro de ilegalizar a todos los partidos de la oposición.
La policía ha comenzado además a registrar oficinas de partidos y organizaciones opositoras, lo que ha provocado que estas formaciones se hayan negado a participar en debates en televisión sobre la crisis institucional que atraviesa el país. El primer ministro ha repetido en varias ocasiones su intención de que las protestas en Tiflis no sean como las de Kiev en 2013, comparación que suele hacer Rusia y que hace recordar que poco después de aquellas manifestaciones proeuropeístas invadió Crimea.
Denuncia de la presidenta
La presidenta de Georgia, Salomé Zurabishvili, se ha convertido en la representante de más alto rango que se ha posicionado a favor de la repetición electoral. Ha denunciado la injerencia de Rusia y sostiene que los comicios no se han celebrado de una manera limpia, transparente y exenta de presiones sobre la oposición.
En las últimas horas, Zurabishvili, a quien el partido ganador de los comicios exige su dimisión, ha denunciado que se han cerrado las tiendas de la capital en las que se venden artículos como máscaras antigás o cascos, es decir, aquellas en las que los manifestantes pueden conseguir material para protegerse de las agresiones de la policía.
Zurabishvili está publicando sus denuncias en su cuenta de X con el hashtag "repression in Georgia" y acusa además al gobierno de llevar al país a una crisis y una inestabilidad cada vez más profundas que han arrastrado a Georgia "al borde del precipicio". La presidenta denuncia además una "dispersión brutal" por parte de la policía en la que "los cañones de agua y los gases lacrimógenos se están utilizando de forma desproporcionada junto a arrestos masivos y malos tratos".
Antonio Martín
Redactor de la sección de Internacional. Se incorporó a la Cadena SER en 2005 y desde entonces ha formado...