Nikola Jokic pide cambios: "En mi país, después de este tipo de rachas, van a pagarte una nómina un tanto menor"
El pívot de los Nuggets muestra su descontento con el juego de su equipo y pide más a sus compañeros
La lista de los mejores jugadores del mundo se compone de nombres de toda clase. Desde LeBron James o Steph Curry, como estandartes del baloncesto, las nuevas generaciones lideradas por Antetokounmpo y Doncic… Pero entre todos ellos, un nombre merece estar presente. Nikola Jokic, que ya ha conseguido un anillo, ha sido nombrado MVP de la NBA en tres ocasiones y que ha liderado y liderado a los Denver Nuggets.
Un equipo que, en comparación con el nivel de juego de hace dos campañas, va en picado hacia abajo. Por aquel entonces, Nikola Jokic era el mejor director de orquesta y los roles y conceptos de juego estaba muy bien definidos. Algo que ahora no sucede, aunque el peso de Jokic en el equipo no haya cambiado.
El jugador serbio empieza a molestarse por los puestos de privilegio y ha alzado la voz en una reclamación clara: necesita más de los que tiene a su lado. La realidad es que el pívot serbio se equivocó al pedir a Russell Westbrook, pues no era el perfil que se necesitaba.
Tras la derrota ante los Wizards, Jokic levantó la voz. El equipo de Denver perdió por 9 contra el peor equipo de la NBA en la clasificación, a pesar de que el serbio firmó el mejor partido de su carrera, con 56 puntos, más 16 rebotes, mientras que el resto, en conjunto, anotó 57 y firmando un 10% en triples.
Por eso, el líder de los Nuggets no se mordió la lengua y advirtió de los cambios que se necesitan en la franquicia: "En el país del que vengo, después de este tipo de rachas, van a pagarte una nómina un tanto menor de la habitual. A lo mejor es lo que tenemos que hacer. Un poco de motivación para reaccionar. También hay otra que sirve: ser castigado al banquillo o quedarse en él".
La Conferencia Oeste está apretada, con Thunder, líder, Grizzlies o Mavericks en los puestos de honor. Los Nuggets, por su parte, están pagando el mal inicio de temporada y están lejos, no solo en números, sino también en sensaciones en la cancha.