Los adultos españoles, estancados y por debajo de la media en lectura, matemáticas y resolución de problemas
España no sale bien parada en el PIACC 2023, el programa de la OCDE que evalúa las competencias de los adultos de 16 a 65 años. Recortamos distancias con la media de los países más desarrollados sobre todo porque ese promedio cae, no porque España registre mejoras significativas respecto al último informe, de hace 10 años
Madrid
Se llama Programa para la Evaluación Internacional de las Competencias de la Población Adulta (PIAAC) y mide el nivel de los adultos de 16 a 65 años en lectura, matemáticas y resolución adaptativa de problemas, tres habilidades que la OCDE, responsable del programa, considera esenciales para el tratamiento de la información y asegurar "la prosperidad tanto en la esfera pública como profesional de los individuos y sociedades". El último, publicado hoy mismo, analiza estas competencias en 31 países -29 de la OCDE y Croacia y Singapur-, y en todas, España se sitúa por debajo de la media de los países más desarrollados y también de la Unión Europea.
La lectura, rozando la media europea
España obtiene 247 puntos en competencia lectora, rozando la media de la Unión Europea, que es de 250 puntos, pero muy por debajo de la que obtienen los países de la OCDE. Somos séptimos por la cola en este grupo de 31 países que participan en el PIAAC, en niveles de Letonia, Hungría o Italia, y casi una de cada tres personas en España, el 31%, tienen un bajo rendimiento en lo que a lectura se refiere.
Operaciones simples y poco más
En matemáticas, España (250) se aleja más de 10 puntos de la media europea (264) y la de la OCDE (263). Compartimos resultados similares con Estados Unidos y Corea, por debajo de Hungría y por encima de Italia. Igual que a la hora de comprender un texto, un 30% de los adultos españoles tienen lo que este informe considera un bajo rendimiento en matemáticas, 5 puntos porcentuales más que la OCDE y 6 más que la UE. Estas personas, que están en el nivel 1 o inferior de esta competencia, son capaces de resolver operaciones sencillas -sumas, restas, multiplicaciones y divisiones- con números pequeños y enteros (que no incluyen decimales o fracciones).
La resolución de problemas, un problema para una de cada 3 personas
El PIAAC 2023 evalúa por primera vez la competencia de los adultos en la resolución adaptativa de problemas (APS por sus siglas en inglés), la capacidad para identificar un problema, explorar soluciones y aplicarlas. Esta destreza se le atraganta a más de uno de cada tres adultos en España, al 35%, y nos sitúa a 10 puntos (241) de la media europea (250) y la de los países más desarrollados (251), empatados con Hungría y por detrás, por citar un ejemplo, de Letonia.
El norte, en cabeza, el sur, a la cola
Para sorpresa de nadie, como se suele decir, Finlandia, Japón, Suecia y Noruega son, por este orden, los primeros en las tres competencias que se evalúan. Portugal y Chile, los últimos en lectura y matemáticas. En la resolución de problemas, Chile vuelve a cerrar la lista pero con Polonia como el segundo con peor puntuación.
Sólo las matemáticas separan a las mujeres de los hombres en España
Si nos fijamos en los resultados que obtienen hombres y mujeres, vemos que en el caso de España no hay diferencias significativas ni en lectura ni en la resolución de problemas, sólo se mantiene la brecha en matemáticas, a pesar de que la población femenina mejora ligeramente los resultados en esta competencia respecto al año 2013.
Los españoles sí aprueban en satisfacción vital
El PIAAC relaciona directamente las competencias con el bienestar individual de los adultos de entre 16 y 65 años y, en este caso, España sí se sitúa por encima de la media: el 77% de la población adulta, tres de cada cuatro personas, está satisfecha con la vida, dos puntos porcentuales más que la media de la OCDE (75%). En cuanto a la salud autopercibida, rozamos la media de los países más desarrollados pero volvemos a estar por debajo, con un 39% de adultos que perciben su salud como excelente o muy buena frente al 41% de la OCDE.