Sociedad

Puigdemont avisa a Sánchez de que "así no podemos continuar" y asegura que Junts "mantendrá su posición"

Así se ha desprendido de la intervención del expresidente catalán, donde también ha acusado al presidente de Gobierno de tener "falta de compromiso"

Carles Puigdemont, en una imagen de archivo. / OLIVIER HOSLET (EFE)

El líder de Junts, Carles Puigdemont, ha avisado este sábado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que "así no podemos continuar", en referencia a los "incumplimientos" de los acuerdos con su partido, ya que en un año "no ha habido avances". Además, ha dejado claro en todo momento que su partido "mantendrá la posición".

Más información

Así se ha desprendido de la intervención de Puigdemont por vía telemática en el Consell Nacional celebrado en Vila-Seca, momento en el que ha retirado que el balance que hace del acuerdo firmado entre el PSOE y Junts para la investidura de Sánchez "no es bueno", al tiempo que ha acusado al presidente de Gobierno de "falta de compromiso". En este sentido, el expresident de la Generalitat ha comentado que su experiencia con el PSOE "no invita al optimismo", y ha garantizado que "estamos preparados para asumir los costes políticos y personales de las decisiones que tomemos". "No somos rehenes de nadie ni nos dejaremos engañar", ha apuntado.

"Tenemos que tener el partido preparado para todas las eventualidades", ha comentado, además, Puigdemont, quien ha subrayado que "no nos importa admitir, si acaba siendo el caso, que el acuerdo con el PSOE no ha sido satisfactorio", como tampoco le costará admitirlo si al final el PSOE "levanta el culo de la silla y se arremangan". Dirigiéndose al partido socialista, el expresidente catalán ha pedido "hechos" y no "promesas vacías". "Si quieren continuar haciendo las cosas de siempre, que no cuenten con Junts", ha reivindicado al tiempo que ha alertado de que Junts no participará en acciones que solo sirvan para "simular competencias". "Si el poder real lo continúa teniendo Madrid, nosotros no queremos estar”, tanto en financiación como en inmigración.

Puigdemont lo califica de "incumplidor persistente"

Al mismo tiempo, Puigdemont ha apuntado que su partido ha decidido dar apoyo a alguien que es "un incumplidor persistente". "Nos parecía que todas las precauciones eran pocas y que en todo caso, en el primer año teníamos que hacer un balance". El citado balance de este año, según ha reconocido, "no es bueno", es "decepcionante, más de incumplimientos que de cumplimientos".

"Un balance que nos ha obligado a dar un golpe sobre la mesa y marcar un punto de inflexión porque las cosas no pueden continuar así", ha manifestado, al respecto, Puigdemont. Además, ha aclarado que Junts firmó el acuerdo con el PSOE para crear "las condiciones" para abordar temas como los "déficits del autogobierno", y, sobre todo, "el derecho del pueblo de Cataluña a la autodeterminación".

"Más de un año después estas condiciones no se han creado", ha deplorado, agregando que, además, desde el Gobierno de Cataluña, liderado por Salvador Illa, "ha ido deconstruyendo aquello que, poco o mucho, hemos intentado construir en la mesa de Suiza". Por eso, "tenemos el derecho para decir que no vamos bien" y exigir al PSOE “respeto al acuerdo de Bruselas”.

100 días del Gobierno de Illa

Por su parte, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha apuntado que solo han bastado 100 días del Gobierno de Illa para ver la "verdadera cara del PSC y que le caigan las caretas", ya que "hemos visto el peor rostro del 155 dentro de la Generalitat en todos los ámbitos". Además, ha afeado que el presidente catalán "trabajar para gustar al PSOE" y a "España". En concreto, el secretario general ha criticado que lo "único" que ha hecho Illa es "poner la bandera española en el Palau, llevar a la policía y la Guardia Civil al 112, promover el aceite Jaén y nombrar a Borrell".

Al mismo tiempo, Turull ha recordado que el Congreso Nacional de Junts celebrado hace casi dos meses en Calella su partido avisó de que "empezaba la ofensiva por Cataluña", una "ofensiva" que tiene como objetivo "la defensa de la nación catalana", una nación "en riesgo por un proceso de españolización sin precedentes".

Turull ha lamentado, por otro lado, que "nunca" un partido "de raíz española como el PSOE y un PSC tan españolista y sectario habían ostentado tanto poder en la Generalitat, en La Moncloa, en la Diputación" y "en el Ayuntamiento de Barcelona a costa de pactar con quien sea y como sea para tener el poder por el poder". Esto, según ha avisado, puede tener consecuencias "devastadoras" para la nación.