"No he sido capaz de tener hijos. Los traería a un mundo del que no he podido disfrutar": la hija de Ana Orantes recuerda a su madre 27 años después de su asesinato

Madrid

La Asociación de Mujeres Juezas de España ha publicado Hijas del miedo (Editorial Península), un libro desgarrador que recopila 19 relatos basados en casos reales de violencia de género. Las autoras, todas juezas y fiscalas, han plasmado sus experiencias en los juzgados, reflejando la crudeza y el dolor de las víctimas: mujeres, niñas y niños atrapados en la espiral de la violencia machista. Este proyecto, que agotó su primera edición en tan solo dos semanas y ya va por la segunda, busca concienciar sobre una lacra social que no deja de sumar víctimas.

Los relatos de Hijas del miedo están organizados en cuatro partes: la infancia (La infancia no se toca), la culpabilidad (¿Qué llevaba puesto?), las supervivientes (Las que están), y las mujeres asesinadas (Las que no están). Cada bloque muestra las múltiples caras de la violencia machista y las consecuencias que deja en las vidas de las víctimas. El prólogo del libro lo firma Raquel Orantes, hija de Ana Orantes, la mujer que en 1997 denunció en televisión los 40 años de maltrato sufridos a manos de su marido. Su asesinato, apenas días después de aquella declaración, marcó un antes y un después en la lucha contra la violencia de género en España.

Raquel nos ha acompañado en La Ventana en el día en el que se cumplen 27 años desde que su madre fue asesinada por su padre. "Hoy es un día especialmente doloroso porque esta herida nunca cierra. Es una herida abierta y que sangra más con el paso de los años porque se siguen viviendo episodios de violencia. A mis 48 años sigo necesitando a mi madre como si fuera el primer día. Me la arrebataron y es un sufrimiento que jamás se acabará", ha comenzado contando Orantes.

Sin embargo, se muestra muy orgullosa de su madre y su valentía. "Él había jurado que si algún día le dejaba, la asesinaría. Y cumplió lo que había prometido. Llevaban 1 año separados y cuando ella estaba libre, la asesinó. Si hubiera conocido a una jueza como ellas (las autoras del libro), se habría podido salvar", ha expresado con una mezcla de dolor y orgullo.

Y es que ni ella ni sus familiares recibieron ningún tipo de ayuda tras la tragedia, ni psicológica ni económica. "Yo tenía 21 años. Viví todas las etapas vitales cuando no me tocaban porque los hijos no somos meros espectadores y sufrimos la violencia. Los padres maltratadores por supuesto que no son buenos padres. A los 8 años no quería a mi padre y sabía que me iba a cambiar el apellido. La vida de mi madre fue el detonante de la aprobación de la ley integral en el 2004. Y siento orgullo de esa mujer valiente que ojalá hubiera podido ser libre. Visibilizó a mujeres sin rostro, y muchas de ellas me escriben diciendo que ella les ayudo mucho a tejer esta red de protección", ha contado sobre la figura de su madre.

Raquel ha querido contar, preguntada por Francino, el por qué su decisión sobre no tener hijos. "Es algo de tal responsabilidad que no he sido capaz. Lo traería a un mundo del que no he podido disfrutar. Me parece algo de tal valor, de tanta responsabilidad, que no he tenido la fuerza. He intentado construir un mundo mejor en mi pequeña vida pero no he podido ser madre", ha dicho Orantes.

Ana Orantes fue, en palabras de su hija, una mujer que se construyó a ella misma a los 19 años. "Se enfrentó a ese ser, porque me niego a llamarle padre. Nos siguen culpabilizando de que no sacáramos a mi madre de este entorno violento y se olvidan de que nosotras también lo sufríamos. Tantas mujeres y tantos hombres se sienten orgullosos del legado de Ana que ese es mi cometido, que el apellido Orantes traspase fronteras. Es una realidad molesta y dolorosa. Este libro es necesario e invito a todo el mundo a que lo lea en un ejercicio de comunión con nuestras propias vidas", ha finalizado.