El Supremo pide el suplicatorio al Congreso para imputar formalmente a Ábalos por cuatro 4 delitos
El magistrado advierte “indicios cualificados” de que el exministro de Transportes utilizó su cargo para cometer los delitos de tráfico de influencias, cohecho, malversación y organización criminal en la adjudicación de contratos de mascarillas durante la pandemia
Madrid
El juez del Supremo, Leopoldo Puente, ha emitido un auto mediante el que solicita al Congreso el suplicatorio para imputar al exministro de Transportes. El magistrado advierte “indicios cualificados” de que José Luis Ábalos “se prevalió” de su condición de Ministro de Transportes para adjudicar los contratos de mascarillas en pandemia a favor de la trama, “a cambio de determinados beneficios económicos”.
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El juez circunscribe de momento las sospechas a las contrataciones de mascarillas por 54 millones de euros en lo peor de la pandemia y nada dice en su auto del supuesto amaño de adjudicaciones ferroviarias o de carreteras en Transportes a cambio de mordidas, denunciadas por el corruptor Víctor de Aldama.
El magistrado detalla los supuestos beneficios obtenidos por Ábalos que aparecen “indiciariamente justificados” en los informes de la UCO, y que son el alquiler de un piso para su pareja, el alquiler con opción de compra de un chalé en Cádiz, y el contrato con Aldama para el alquiler con opción de adquisición de un piso en el madrileño paseo de La Castellana por un valor, aparentemente, muy inferior al de mercado.
En su auto, el juez acuerda pedir al Congreso de los Diputados el suplicatorio para que Ábalos pierda su inmunidad como parlamentario y poder imputarle los delitos de pertenencia a organización criminal, malversación, cohecho y tráfico de influencias.
Una vez obtenga el Supremo el permiso para investigar al diputado, el juez podrá ordenar el análisis de su patrimonio y cuentas corrientes, gastos en el periodo objeto de pesquisas, y por tanto si hay rastro de las supuestas coimas de más de 600.000 euros en efectivo que Aldama asevera haberle pagado, o no aparecen otros ingresos y gastos en su vida que los que ha podido afrontar con sus sueldos como cargo público y préstamos debidamente justificados, tal y como defiende el exministro de Transportes.