Putin reconoce que no sabe cuándo terminará la guerra de Ucrania y asegura que está dispuesto a reunirse con Trump

Vladimir Putin ha repasado como cada año antes de Navidad la actualidad de su país, marcada por tercer año consecutivo por la invasión de Ucrania, que ha admitido que estaba aprobada desde antes de febrero de 2022, fecha en que comenzó, e incluso ha lamentado no haberla lanzado en un momento anterior. En más de cuatro horas de intervención, el presidente ruso ha asegurado que las tropas de su país ganan terreno "a cada día que pasa" en Ucrania, pero ha admitido también que la situación económica del país, asediado por las sanciones de los aliados occidentales de Ucrania, no pasa por su mejor momento.

Putin ha intentado lanzar un mensaje optimista sobre el desarrollo de la invasión de Ucrania, donde asegura que se "están consiguiendo los objetivos principales" que se había marcado Rusia, de hecho en los últimos meses ha logrado avances en el Donbás, pero ha admitido que no sabe cuándo va a terminar el conflicto, sobre todo en relación con los combates en el propio suelo de Rusia, en la región fronteriza de Kursk.

En cuanto a unas posibles negociaciones de paz con Ucrania, Putin ha ironizado sobre quién manda en el país ya que no se han celebrado elecciones precisamente por la invasión por parte de Rusia. Dice Putin que está dispuesto a negociar "con las autoridades legítimas de Ucrania", por lo que ha concluido que "si alguien concurre a una elecciones y gana legitimidad, hablaremos con cualquiera, incluido Zelenski".

Sin fecha para el final de la guerra

"Tengan por seguro que vamos a destruir al enemigo, pero no puedo decir una fecha para esa victoria, nuestros chicos siguen luchando cada día", ha admitido Putin en relación a los combates en la región rusa de Kursk. Ha admitido más avances en suelo ucraniano que a la hora de recuperar territorio ruso, aunque en todo caso ha asegurado que "no estamos hablando de un avance de 100, 200, 300 metros. Nuestros combatientes están recuperando kilómetros cuadrados de territorio".

El presidente ruso se ha referido también al desarrollo del misil hipersónico "Oreshnik" que ha utilizado ya contra objetivos en suelo ruso. Según Putin, "ahora mismo es imposible que los países occidentales puedan derribarlo". Putin ha retado a Estados Unidos a "un duelo de alta tecnología" en el que le ha dicho a Estados Unidos que no sería capaz de interceptar un bombardeo con este tipo de misiles sobre Kiev.

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Que EEUU despliegue en Kiev toda su defensa antiaérea y nosotros lanzamos el Oreshnik. Y a ver qué pasa

—  Vladimir Putin

Putin se ha referido al asesinato esta misma semana del encargado ruso de la defensa química de su país, Igor Kirilov, por el que ha acusado directamente a Ucrania: "El régimen de Kiev comete repetidamente este tipo de ataques terroristas", ha dicho el presidente ruso, admitiendo por tanto que no sólo Kirilov sino otros altos mandos del ejército cuyas muertes se investigan han caído por operaciones exitosas de los servicios secretos de Ucrania en Moscú.

Futura reunión con Trump

El presidente ruso asegura que no habla con Trump desde hace cuatro años, pero ha añadido que está preparado para reunirse con él cuando el presidente electo de Estados Unidos quiera. "Estoy seguro de que tendremos de qué hablar", ha ironizado Putin quien, a la pregunta de un periodista estadounidense sobre si en ese encuentro Rusia llegará como un Estado más débil, le ha contestado que "seguramente eso le gustaría a usted".

Ha añadido también que no ha hablado aún con Bashar al Assad después de que el antiguo presidente de Siria huyera de su país, aunque en todo caso ha negado que esa huida de su principal aliado en Oriente Próximo suponga una derrota para la influencia de Rusia en la región.

Prácticamente todos los países de la OTAN están peleando contra Rusia

—  Vladimir Putin

Putin ha contrapuesto la identidad de Rusia con la de los países de la Unión Europea como una de las claves para que el conflicto de Ucrania no se haya resuelto todavía a favor de los aliados de Kiev. "¿Cuál es la identidad de los europeos?", se ha preguntado Putin, quien ha añadido que "los franceses primero son franceses, los españoles primero son españoles. Y la soberanía es un concepto muy importante para nosotros", ha explicado para defender que en su opinión Rusia tendrá más capacidad de aguante.

Reconstrucción de las zonas invadidas

Varias personas le han preguntado en el estudio de televisión donde ha intervenido por el futuro de los territorios que Rusia ha ocupado en Ucrania y que están bajo la administración de Moscú. Es el caso de Mariúpol, donde hace algunos días varios funcionarios fueron acusados de saquear instalaciones.

Putin ha prometido ayudas económicas para estos territorios que en todo caso el gobierno de Ucrania insiste en que no pretende ceder en ningún caso en unas hipotéticas conversaciones de paz. "Prestamos mucha atención a Mariúpol", ha dicho Putin, quien anticipa que se enviarán expertos y mano de obra para la reconstrucción de cientos de edificios dañados durante la guerra.

En todo caso, Putin ha admitido que en el momento actual la economía rusa afronta una situación preocupante. Aunque ha anticipado un crecimiento de un 4% de la economía rusa para este año, Putin admite que la inflación, que se sitúa en el entorno del 9%, es un problema para la estabilidad financiera del país. Con ese escenario, el presidente ruso ha vuelto a defender el fortalecimiento de un sistema de cooperación internacional paralelo a las áreas de influencia de Estados Unidos y de sus aliados occidentales.

El presidente ruso ha admitido además que el choque de dos petroleros junto a la península ocupada de Crimea es "un desastre ecológico" cuyo alcance aún se está cuantificando, aunque ha confirmado que al menos el 40% del petróleo que transportaban se ha vertido al Mar Negro.