Carles Sans: "Si veo desde el escenario a una persona que no se ríe, me obsesiono y se convierte en mi objetivo"

Madrid

Carles Sans, conocido por su faceta como uno de los miembros fundadores de Tricicle, ha dado un paso al frente con su primer monólogo en solitario, titulado Por fin solos. Tras cuarenta años formando parte del grupo de humor que revolucionó la escena española con su humor gestual, Sans se enfrenta al escenario de manera individual.

"Cuando Tricicle decidió echar la persiana, yo me tuve que plantear qué quería hacer con mi vida", ha explicado Sans en La Ventana, algo que, ha confesado, nunca pensó que ocurriría. "Siempre pensé que con Tricicle se iba a acabar todo, pero luego me di cuenta de que realmente tenía ganas de seguir trabajando en este oficio que me gusta tanto. No había otra que hacer un espectáculo yo solo en el que no parara de hablar", ha señalado el actor.

A pesar de ser un monólogo, el espectáculo sigue teniendo muy presente el ADN de Tricicle: "La gracia no es solo lo que cuento, que es muy loco, sino cómo lo cuento". Un show "basado en hechos reales" que hace que el público se pregunte si es así o no: "Mucha gente sale del teatro y me dice, pero vamos a ver, ¿esto es real? Y les digo, absolutamente, vamos a ver, le he puesto un poco el IVA, pero todo es real", ha comentado Sans entre risas.

El monólogo y el salto al escenario en solitario

El proceso de transitar de un formato grupal a uno en solitario ha sido, según Sans, todo un reto. "Yo cuando empecé a estudiar en la Escuela de Arte Dramático de Barcelona hacía teatro de texto, pero se cruzó en mi vida Tricicle y ya me dediqué al gesto. Siempre me había quedado ese gusanito dentro, pero nunca pensé que se me daría esta oportunidad", ha confesado el actor.

El público y el legado de 'Tricicle'

El público es parte esencial de este nuevo proyecto de Carles Sans en solitario, aunque muchos de los asistentes no pueden evitar hacer comparaciones con su etapa en Tricicle. "Sabía que me la jugaba, que era un paso muy comprometido. Cuando vienes de estar cuarenta años con una compañía de éxito y de repente le dices al público que te vas a hacer otra cosa muy distinta, en general el público suele desconfiar de esto", explicaba.

Una prueba que Sans ha superado. "No hace mucho en un restaurante me aborda un señor y me dice, 'perdone, el otro día fui a verle y he de confesarle que vine con unas expectativas muy bajas, pero cambié por completo porque me reía más o tanto como cuando iba a verles a Tricicle'. Para mí eso fue una satisfacción enorme porque era ese salto el que me costaba", ha recordado el humorista.

Sobre las diferencias entre los públicos de distintas regiones, Sans ha reconocido que cada lugar tiene su propio estilo de humor. "Hay un humor que es universal, pero, ahora bien, se ríen distinto. Hay partes de España que son más extrovertidas que otras. Toda la franja de Levante es muy festera, en cambio, lo que es cantábrico, Galicia, se ríen, pero hay que currárselo un poquito más, hay que convencerles. Si vamos al sur, en Sevilla tienen su humor, te examinan, pero todos se acaban riendo de lo mismo", ha afirmado.

De hecho, Sans sale al escenario con una única convicción: hacer reír "sí o sí". "Si veo en algún momento desde el escenario a una persona que no se ríe, me obceco, me obsesiono, y en lo único que pienso es en hacerlo reír", ha comentado.

Fechas de la gira

Carles Sans continuará su gira con Por fin solos en los próximos meses, con paradas en varias ciudades españolas. Estará en Madrid hasta el próximo 6 de enero; en Rubí (Barcelona), en La Sala Teatre, el 11 de enero; en Barcelona, en el Teatre Poliorama, del 23 de enero al 16 de febrero; en Valencia, en el Teatre Olympia, del 19 al 23 de febrero; en Castelldefels, el 28 de febrero; en Vilassar de Dalt (Barcelona), en La Massa Teatre, el 1 de marzo; en León, el 7 de marzo; y en Valladolid, el 8 de marzo.

Por último, Sans ha reflexionado sobre la importancia de la risa, especialmente en tiempos difíciles. "El humor en situaciones como la Dana es imprescindible. La Comunidad Valenciana, que es una comunidad que siempre se ha portado conmigo maravillosamente, son gente muy hospitalaria y se te rompía el corazón viendo cómo sufrían. Voy a ir allí y en lo que pueda ayudar, desde luego, voy a estar", ha asegurado.