La turista fallecida en Tailandia al ser atacada por un elefante era una alumna de la Universidad de Navarra
La joven, de 22 años, se encontraba bañando al animal cuando este le empujó con la trompa, provocando el golpe fatal
Bangkok
Una turista española, estudiante de la Universidad de Navarra, ha muerto este viernes al ser atacada por un elefante mientras le daba un baño en un centro de paquidermos en la isla de Yao Yai, en el suroeste de Tailandia, según han indicado fuentes de la Policía y del centro. Desde la Universidad de Navarra, por su parte, han señalado que la joven cursaba los estudios de Derecho y Relaciones Internacionales.
La Policía de Yao Yai ya ha desvelado algunos detalles sobre el incidente. La víctima se llamaba Blanca Ojanguren, de 22 años, y se encontraba en un santuario de elefantes del país. La joven estaba dando un baño al animal cuando este la empujó con la trompa, lo que desencadenó el golpe letal. El ataque no implicó el uso de los colmillos por parte del paquidermo, como habían asegurado fuentes del centro.
Toda esta información ya ha sido ratificada por Yan, el propietario del centro Koh Yao Elephant Care, en el que tuvo lugar el accidente. Según ha comentado, en el momento de los hechos había unas 18 personas en el lugar (10 trabajadores y 8 turistas), entre ellos el novio de la turista española, quien presenció el ataque. Además, desde el santuario han asegurado que nadie más resultó herido.
Blanca, tras recibir el golpe, fue llevada de emergencia a un hospital cercano, donde finalmente falleció. Más tarde, su cuerpo fue trasladado a otro hospital en la isla turística de Phuket, donde ya se están preparando los trámites para la repatriación de la joven.
El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, por su parte, ya confirmó este viernes la muerte de la turista. Fuentes del departamento que encabeza José Manuel Albares indicaron que la Embajada en Bangkok pudo "confirmar la trágica muerte por accidente" de la joven. "El Consulado en Bangkok está en contacto con los familiares, ofreciendo toda la asistencia consular necesaria" como es habitual en este tipo de circunstancias.
El santuario 'Koh Yao Elephant Care'
El centro ya se encuentra cerrado al público desde el incidente de este viernes. Así lo ha explicado el propietario del santuario, que también ha incidido en que no hay una fecha próxima de reapertura. Según ha explicado Yan, en el lugar residen tres elefantes, entre ellos la hembra de 50 años implicada en el incidente. Cada día abre sus puertas a entre 10 y 30 visitantes, que acuden para observar a los paquidermos o darles un baño al aire libre, una de las actividades más populares del país.
Según ha mencionado el dueño del santuario, que empezó a funcionar tras la pandemia, la Policía se ha presentado este sábado para tomar continuar con las pesquisas sobre la muerte de la turista, y les ha pedido la revisión de las licencias del centro y de las condiciones de funcionamiento en general. Además, Yan ha constatado que la elefanta tenía "décadas" de experiencia en actividades y espectáculos con turistas, pero que se asustó por circunstancias aún desconocidas y reaccionó atacando a la joven.
Según se ha podido constatar, algunos turistas han acudido al centro con la intención de entrar a realizar algunas de las actividades que ofrece el centro, aunque fueron sorprendidos por la noticia del cierre y del incidente. Se espera, por otro lado, que los familiares de la víctima lleguen en la noche de este sábado a Tailandia para acelerar los trámites de repatriación.
Otros casos vinculados a los elefantes
En los últimos 12 años se han producido 240 muertes a causa de ataques de elefantes salvajes, incluidas 39 víctimas mortales en 2024, según se ha desprendido de los datos del Departamento de Parques Nacionales citados por el diario 'The Nation'. En Tailandia, en concreto, se calcula que más de 4.000 elefantes salvajes viven en los santuarios, parques nacionales y reservas naturales del país. Se trata de una población en aumento aunque aún muy por debajo de los 300.000 paquidermos que poblaban el país hace más de un siglo.
Se estima, además, una población similar de elefantes domésticos en el país, la mayoría de ellos utilizados en espectáculos destinados a turistas. Antiguamente, miles de elefantes eran usados en la industria maderera, pero cuando la tala se prohibió en 1989 los paquidermos comenzaron a ser exhibidos en las calles para pedir limosna -algo que ya no se observa en el país- y en centros de espectáculos lúdicos.