De entrada, topamos con Musk

Madrid

Antes de saber cómo irá el pulso de Donald Trump contra Europa, que él mismo ha anunciado, ya pintan bastos. Por persona interpuesta. Topamos, de entrada, con Elon Musk, el mayordomo del presidente electo, mayordomo, sí, aunque sea el hombre más rico del mundo.

Primero el magnate inició campaña electoral en Europa anunciando su apoyo a la extremista Alternativa para Alemania, que hace poco tuvo que echar a su dirigente pro-Hitler. Enseguida, también apoyó a Neil Farage, el extremista británico que encabezó la suicida operación del Brexit, saldada con un desastre económico. También la Comisión Europea le ha abierto expedientes por usar su red X, antes Twiter, como palanca de desinformación. El primer ministro británico, Keir Starmer, ha replicado finalmente a Musk, sin mentarlo, que provocaba con un viejo asuntos de abusos sexuales a adolescentes, nada que ver la gestión de este Gobierno laborista. Y el presidente francés, Emanuel Macron le ha descalificado como jefe de una “internacional reaccionarias”.

Veremos cómo evoluciona esta tensión. Porque también es cierto que la italiana Giorgia Meloni se exhibe como amiga del magnate: y que el pretende hacer más negocios en Italia, vendiéndole sus satélites Starlink. Por eso patrocinó una destacada visita de primer ministra a Trump. En medio, Irán: Meloni quiere rescatar a la periodista de su país encarcelada por los ayatolás y estos a un ingeniero suyo detenido en Milán, a quien Washington acusa de ser terrorista. ¿Tráficos de influencias? ¿vidriosos cambios de cromos? Antes de empezar el segundo mandato Trump todo suena fatal y huele peor.