Semillas y árboles para calles y jardines

Para este comienzo de año, Meterse en un jardín lleva al Hoy por Hoy plantas trepadoras, asiáticas y chilenas ideales para plantar en calles y jardines. Te contamos las claves para que la semilla de estas especies germine bien y las recomendaciones de conservación de la planta. La primera planta que vamos a analizar es la glicina, seguiremos con el arce japonés, el pistachero chino y el maitén. La glicina es una planta trepadora muy común de la que hemos hablado en el programa en alguna ocasión, como posibilidad para cubrir una columna de la terraza. El tratamiento para que la semilla de glicina germine bien es tan sencillo como hidratarla durante 24 horas en agua, para que la semilla active su respiración y se decida a germinar. Hay que tener la precaución de sembrar la semilla muy superficial, para que no se pudra, algo a lo que es propensa esta semilla si se entierra demasiado. Vamos a sembrar unas diez glicinias en nuestro jardín, para ver qué tal germinan. En un principio, deberían germinar bien, sin problema. El único inconveniente que tenemos a la hora de reproducir esta planta de semilla es que el resultado es muy distinto: unos ejemplares nos darán más flor, otros menos, con inflorescencias de mayor o menor tamaño. Por eso, las glicinias que se compran en los viveros son esquejes enraizados o están injertadas, para asegurar la calidad de la floración y que se trate de ese mismo cultivar, de esa misma variedad. La glicinia que se obtiene de semilla suele tardar en florecer, a veces hasta dos o tres años incluso. Pero nosotros vamos a germinarlas y luego las regalaremos a personas que quieran cubrir una valla, por ejemplo, no tendremos tiempo para ver si nos florecen antes o después. La segunda especie que vamos a sembrar es un arce japonés. En concreto, es un cultivar de la especie Acer palmatum que se llama ‘Seiryu’. Tiene unas hojas muy finamente divididas, son una maravilla. Enamora con tan solo ver sus hojitas. Aunque para la primavera me gustaría traer un arce japonés crecidito para la terraza, mientras hacemos este semillero. Como en el caso de la glicinia, vamos a dejar la semilla en agua durante 24 horas, hidratándose, para acelerar la germinación. Los arces japoneses me encantan, van a quedar muy bien. El pistachero chino (Pistacia chinensis) es una especie del centro y oeste de China, de la familia del pistachero (Pistacia vera). Por cierto, hablando del pistacho o pistachero, hay un nombre mucho menos utilizado para este árbol que es el de alfóncigo, que me encanta, de raíces árabes, claro. En el caso del pistachero chino, es una planta que cada vez se planta más, por diversas razones. La primera, por supuesto, es su belleza, ya que tiene una hoja compuesta preciosa, que le da un cierto aire incluso hasta tropical. Además, sus hojas tiñen en el otoño en unos colores rojizos y anaranjados espectaculares. Este árbol se está utilizando en las calles, ya que resiste muy bien condiciones muy duras de cultivo, como la sequía. Como nos recuerda la Flora of China, que recopila las especies de ese país, en su lugar de origen está acostumbrado a vivir en suelos rocosos y a altitudes desde los 100 hasta los 3.600 metros, por lo que está equipado para la vida dura que puede sufrir en esas cotas: vientos, suelos pobres, frío extremo incluso. Para que nuestras semillas de pistachero chino germinen bien, habría que hacer un proceso que se llama estratificado frío. Consiste en dejar la semilla en el frigorífico, a una temperatura de unos cinco grados centígrados, para imitar al invierno que esa semilla sufriría en su lugar de crecimiento. Esta temperatura se aplica durante unas cuantas semanas, que depende de la especie a semillar. Este frío lo que hace es activar el despertar del embrión de la semilla. En el caso del pistachero chino se recomienda una estratificación fría durante dos meses a cuatro grados centígrados incluso. En principio, nosotros no vamos a hacerlo, y veremos si con el frío que sufra en las bandejas donde haremos el semillado es suficiente. Si vemos que no germinan bien en la primavera, haremos una segunda prueba con el estratificado en frío. El maitén (Maytenus boaria) es un árbol sudamericano maravilloso, con una belleza sobria perfecta. Crece en la región de los Andes, tanto en la vertiente argentina como en la chilena, de hojas endurecidas, como puedes comprobar tocándolas. Es una de las especies arbóreas cuyo cultivo puede ser interesante como arbolado urbano, por su resistencia a estas condiciones de las ciudades. Así que vamos a experimentar con él en la terraza de la radio, vamos a ver qué tal crece en las alturas madrileñas.

Semillas y árboles para calles y jardines

Comenzamos el año plantando glicinas, arces japoneses, pistacheros chinos y maitenes

Eduardo Barba

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