RCD Mallorca y Real Madrid se verán las caras este jueves a las 20:00 en la segunda semifinal de la Supercopa de España, que se disputará en Arabia Saudí. La expedición del club balear llegó este martes a Yeda, acompañada por un grupo de 70 aficionados a los que ha invitado para asistir al torneo. Con los jugadores volaron los hinchas que fueron agraciados en un sorteo organizado por el club con el billete de avión de ida y vuelta y la entrada al encuentro contra el Real Madrid, además de un pase para la final en caso de victoria ante el cuadro blanco y en la que se enfrentarían al ganador del Athletic Club - FC Barcelona previsto para este miércoles. A la llegada al hotel y al igual que ocurrió con el resto de equipos que disputan la Supercopa, los responsables del hospedaje dieron la bienvenida a la plantilla con colgantes de hojas como gesto de hospitalidad. Destacar que el equipo, dirigido por Jagoba Arrasate, será el último equipo en entrenarse antes de la semifinal. Su sesión está programada mañana a las 20.00 hora local (18.00 en España), dos horas después de que lo haga el Real Madrid. El entrenamiento será en la ciudad deportiva King Abdullah, anexa al estadio, y antes de él comparecerá ante los medios Arrasate y Antonio Raíllo. La novedad en la expedición del Mallorca es Samú Costa, recuperado de su lesión en el sóleo de la pierna izquierda, si bien sigue en duda su participación ante el Real Madrid. A la llegada al hotel de Yeda, una veintena de aficionados mallorquinistas se quedaron sin alojamiento por «overbooking» pese a haber hecho la reserva con anterioridad. Estos seguidores bermellones llegaron este martes a la ciudad árabe y se encontraron con el problema nada más llegar a la instalación. El club, junto a los hospedajes de la ciudad árabe, se pusieron manos a la obra y finalmente encontraron una solución. Eran cuatro los aficionados del RCD Mallorca que finalmente se quedaron sin encontrar una habitación para poder pasar la noche y el equipo encontró una solución que jamás podrán olvidar: se encuentran en el hotel donde los baleares estarán durante todo el torneo. Por lo tanto, han pasado de estar en la calle a desayunar en el comedor de los jugadores y estar con ellos. Sin lugar a dudas, una experiencia que no podrán olvidar jamás.