James Rodríguez está más cerca que nunca de jugar sus últimas horas como futbolista del Rayo Vallecano. El colombiano está negociando con el club la rescisión de su contrato, que expira el 30 de junio de 2025. Esto supondría el punto y final al paso del «cafetero» por el equipo madrileño, ya que apenas ha disputado minutos con la camiseta de la franja: solo lleva 203, todos ellos repartidos en siete encuentros: seis de LaLiga y uno de Copa del Rey. En solo de ellos fue de la partida para el entrenador Íñigo Pérez. El colombiano fue uno de los grandes reclamos en el pasado mercado de fichajes estival, ya que James Rodríguez tiene un gran renombre y su llegada a Vallecas hizo que muchos aficionados colombianos se acercasen hasta el estadio madrileño para poder ver al «cafetero» jugar con su nuevo equipo. Sin embargo, esa efervescencia se fue diluyendo y eso que venía de ser el mejor futbolista de la Copa América 2024. Desde el principio se vio relegado a un segundo plano y su técnico, Íñigo Pérez, nunca le ha visto como una posibilidad real de ser titular y asentarse en el once titular. Además, la última vez que James entró en una convocatoria fue hace justo un mes, el 7 de diciembre de 2024, para sentarse en el banquillo frente al Valencia. No jugó. Algo que tampoco hizo frente al Girona, Alavés, Athletic Club de Bilbao, Sevilla y Valencia, rivales ante los que contempló el partido desde el banquillo. En este último mes su desaparición de las convocatorias ha sido un misterio, en parte por la gestión que ha hecho el club de su caso. De hecho, de toda la primera plantilla, solo un jugador ha dispuesto de menos minutos que James Rodríguez: ha sido el delantero Raúl de Tomás con 90 minutos. A la espera de que se conozca la resolución sobre su futuro, James Rodríguez ha sido tendencia durante este miércoles porque ha estado presente en Italia, en el partido que Colombia y Uzbekistán disputaron en el Mundial de la Kings League. De hecho, era oficial que iba a disputar el «penalti presidente» para el país cafetero y así fue. Con 3-0 favorable para su país, el centrocampista lo tiró con la camiseta de Colombia y con pantalones largos. Sin embargo, el portero de Uzbekistán lo detuvo para la frustración del «cafetero». Esto ha sido la gota que ha colmado el vaso en los aficionados del Rayo Vallecano, puesto que ya quieren a James Rodríguez lejos del equipo madrileño para la segunda mitad de la temporada liguera.