Xavier Vidal-Folch: "Defender a Luis Rubiales era muy difícil y la chulería y machirulería del personaje lo complicaba aún más"

Madrid

La sentencia del caso Rubiales es ambivalente. La condena al ex presidente de la federación de fútbol por besar en la boca a la jugadora Jennifer Hermoso sin su consentimiento es contundente. Pero la cuantía de la pena, una multa corta, frente a la petición fiscal de dos años y medio de cárcel, parece chirriar con la calificación de agresión sexual. Algunos también se sorprenderán por el descarte de las presuntas coacciones. Pero el juez lo ha visto así y es su criterio el que prima. De momento, porque el condenado ha anunciado que recurrirá.

Alguien sale ganando y con merecimiento profesional: su abogada, Olga Tubau. Triunfó en procesos famosos, defendiendo a la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau o al antiguo mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero. Defender a Luis Rubiales era muy difícil y la chulería y machirulería del personaje lo complicaba aún más. Tubau trabajó de lo lindo y ganó a la fiscal, o empató. Y casi casi, al juez.