Miguel Maldonado y el primer “pufo inmobiliario” de la historia de España: “Fíjate cómo es la gente en este país”

Madrid

El precio de la vivienda no deja de crecer en España por culpa, entre otras cosas, de la especulación inmobiliaria. A pesar de que se han propuesto numerosas medidas para hacer frente a este tipo de prácticas, cada vez son más las personas que invierten en bienes inmuebles como pueden ser viviendas o terrenos con el objetivo de obtener un beneficio superior al que se obtendría vendiéndolos o alquilándolos inmediatamente. Especialmente en las islas Canarias y en Baleares, donde el precio de los inmuebles ha crecido hasta límites insospechados. Una práctica, que parece moderna, pero que se lleva haciendo desde hace cientos y cientos de años en todo el mundo.

También en España, donde tenemos que remontarnos hasta el siglo XVI para descubrir el primer gran pelotazo inmobiliario en la historia de nuestro país. Sobre él ha hablado Miguel Maldonado en el último capítulo de Sastre y Maldonado, donde ha recuperado las artimañas del duque de Lerma para sacar el mayor beneficio económico de unas tierras que se había comprado años atrás en Valladolid.

El truco del duque de Lerma

A finales del siglo XVI, concretamente en 1598, el rey Felipe II fallecía como consecuencia de una larga enfermedad y su hijo Felipe III, de apenas 20 años, pasaba a ser coronado como rey de España, Portugal, Nápoles, Sicilia y Cerdeña. Nada más llegar al poder, el monarca decidió delegar los asuntos de gobierno en manos de su valido Francisco de Sandoval y Rojas, quien sería conocido a partir de entonces como el duque de Lerma. Un amigo de la infancia con una capacidad de influencia brutal sobre Felipe III hasta el punto de que le convenció de que tenían que trasladar de la capitalidad del reino desde Madrid hasta Valladolid por su propio beneficio.

Varios años atrás, concretamente en 1561, el rey Felipe VI escogió Madrid como la sede permanente de su corte por varios motivos. Entre ellos algunos como la centralidad geográfica de la ciudad o su seguridad respecto a otras ciudades que estaban más expuestas a ataques marítimos como Sevilla o Barcelona. A partir de entonces, la Casa Real española comenzó a reinar en Madrid hasta que, en 1601, Felipe III decidió trasladarlo todo hasta Valladolid en un movimiento cuanto menos sorprendente.

"Fíjate cómo es la gente"

Un movimiento pergeñado por el anteriormente citado duque de Lerma, quien había comprado una serie de terrenos en Valladolid años atrás con el objetivo de sacarle el mayor rédito económico en un futuro. Después de convencer al rey de que Valladolid tenía todo lo necesario como para ser la capital del reino, el duque le vendió a la corona sus terrenos por un valor 30 veces superior al que lo había comprado años atrás: "Fíjate cómo es la gente en este país. Todo esto de llevarse la capitalidad de Madrid fue un pufo que montó el duque de Lerma. Compró terrenos en Valladolid a precio de culo y le dijo al rey, majestad, vamos a mover la capital. Con lo cual subió el precio de todos sus terrenos y de sus fincas y le dijo ya estaría, otra vez a Madrid. Entonces se llevó todo otra vez la capital y el duque de Lerma vendió los terrenos a precio de cojón de mico".

Por todo ello, Miguel Maldonado cree que es un personaje que se podría equiparar a otros más actuales como Jesús Gil, quien también uso sus influencias para convertirse en uno de los hombres más poderosos del país. Un personaje que acabó protagonizando el que ya es por todos conocido como primer "pufo inmobiliario" de la historia de España.