Aimar Bretos: "¿Oponerse a la salvajada de EEUU de matar un preso con un pelotón de fusilamiento... también es woke?"

Madrid

Matar a una persona a tiros para cumplir la pena de muerte. Que el Estado le haga a un preso una marca a la altura del corazón para que los verdugos apunten y lo maten a tiros. Esta salvajada se va a llevar a cabo esta noche en Estados Unidos, en Carolina del Sur, para matar a un hombre condenado a pena de muerte por haber asesinado a sus suegros y haberlo intentado con su novia en 2001. Se llama Brad Sigmon, tiene 67 años, y si no hay una sorpresa de última hora, esta noche, le van a poner una capucha, van a dibujarle esa marca a la altura del corazón y un pelotón de fusilamiento formado por tres funcionaros le va a disparar a matar. Hace quince años que no se usaba esta técnica en Estados Unidos para ejecutar a los presos condenados a muerte. Todavía cinco estados la contemplan. Y este preso la ha elegido porque la alternativa era morir abrasado y entre terribles dolores en la silla eléctrica... o la muerte lenta y agónica que se produce en muchos casos con la inyección letal.

Estados Unidos, el país cuyo vicepresidente se permitió venir a Europa a decirnos que los europeos estamos sumidos en un retroceso de nuestros valores, Estados Unidos va a matar esta noche a tiros a un preso por los crímenes que cometió hace un cuarto de siglo. Un pelotón de fusilamiento. Y los testigos ahí sentados, mirando, al otro lado del cristal. Pero oye, quizá considerar esto una salvajada inhumana... también es cultura woke.

Tanto que quieren hacer América grande de nuevo... pueden empezar por asumir unos estándares mínimos de civilización y humanidad