Sinner perfila su vuelta tras la sanción por dopaje: Hamburgo confirma su presencia justo antes de Roland Garros

El italiano Jannik Sinner, número 1 del mundo que acordó 3 meses de sanción tras haber dado positivo en clostebol en 2024, jugará, el ATP 500 de Hamburgo para preparar Roland Garros, el segundo Grand Slam del año. El torneo germano, aunque ha sido el primero en confirmar su presencia, previsiblemente no será el que acoja su esperado regreso. Y es que la semana previa tiene lugar el Masters 1.000 de Roma y ante la afición transalpina está previsto que sea una de las principales bazas. Por calendario, teniendo en cuenta la fecha de expiración de su sanción por dopaje, sería su primera posibilidad para participar en un torneo ATP. El cartel del Foro Itálico, eso sí, se hará esperar unos días más.

La sanción de tres meses que acordó con la Asociación Mundial Antidopaje (AMA) le impedirá volver a competir en el circuito hasta el 5 de mayo. Justo a tiempo para el torneo de Roma, donde se pretende que sea recibido por todos los italianos con su puesto en el ránking intacto.

La hoja de ruta en mayo será lo más intensiva posible. Terminada la cita de la capital italiana, Sinner no descansaría para viajar a Hamburgo. Allí disputará el ATP 500 por primera vez en toda su carrera, tal y como informó la organización del torneo, en un evento que se disputará entre el 17 y el 24 de mayo. El colofón llegará sin descanso inmediatamente después con las dos semanas de vértigo que ponen a la Philippe Chatrier de Roland Garros en el foco del tenis mundial.

La sanción de la AMA prevé también que hasta el día 13 de abril el tenista no pueda entrenarse con ningún jugador inscrito en el circuito. Será solo a partir de esa fecha cuando pueda empezar a incluir espárrines ATP en sus sesiones.

Fin a un positivo de dimensiones mundiales

La penalización que recibió el actual campeón de Australia se debe al doble positivo en clostebol que se le detectó en los análisis a los que se sometió en marzo del pasado año, en Indian Wells, y que justificó siempre fueron provocados por un masaje sin guantes de un fisioterapeuta -ya despedido- que se estaba curando una herida de su dedo con un medicamento que contenía la sustancia prohibida. En un inicio, la AMA pidió un año de suspensión, pero en febrero de 2025 llegó a un acuerdo con el jugador al encontrar las justificaciones plausibles y solo castigando su responsabilidad en las acciones de su equipo.