Todo lo que necesitas saber para hacer un buen abonado de tus plantas

Madrid

Este martes repasamos las mejores prácticas para llevar a cabo el abonado de nuestras plantas y respondemos a todas las preguntas que suelen surgir en torno a esta práctica. Además, presentamos al Sedum Palmeri, una planta suculenta muy popular en México que puede ser una buena solución para proteger otras plantas del calor.

El sedum palmeri

Seguro que muchas personas en casa tienen esta planta suculenta en alguna maceta. En este caso se trata de una especie de Sedum mexicana muy popular, que recibe el nombre científico de Sedum palmeri. En honor de nuestros oyentes mexicanos, que me consta que los tenemos, mencionaré los estados en los que crece esta planta: Coahuila, Guanajuato, Hidalgo, Nuevo León, San Luis Potosí, Tamaulipas y Veracruz. Pues bien, lo curioso de esta planta es que la encontramos por toda España, desde Galicia hasta Almería, desde Cádiz hasta Girona.

Tiene las hojas de color verde claro, y están agrupadas en la punta de un tallito, como si las hojas fueran flores, en forma de roseta. Sus hojas más viejas adquieren un color rojizo, que contrasta a las mil maravillas con las hojas verde claro. Sus tallos suelen descolgar, por lo que es una planta perfecta para que descuelgue desde el borde de la maceta. Como es una planta suculenta, y acumula agua en sus hojas y tallos, es perfecta para esas personas que se olvidan de regar. También queda muy bien cuando se planta junto a otras plantas suculentas, como tenemos nosotros en una jardinera, en la que hemos mezclado varias especies.

Ahora está en plena floración, por lo que a la belleza de sus hojas verde claro y algunas hojas rojizas se unen estas florecitas de color amarillo limón, un amarillo muy, muy intenso. En realidad, lleva en flor un par de meses, porque esta es de esas plantas suculentas que crecen en pleno invierno.

Una solución para proteger tus plantas del calor

Este sedum sería perfecto para meter en los bordes de las macetas y de las jardineras que tengan mucha insolación. De este factor también hemos hablado unas cuantas veces en el programa, ya que es un motivo de fracaso en el cultivo de muchas plantas.

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El escenario al que nos referimos sería este: una jardinera o un macetón en el que cultivamos alguna planta, y al que incide en la pared externa el sol, durante muchas horas incluso. La consecuencia es que el sustrato se pone a muchos grados, y la raíz de la planta no puede crecer con normalidad, ni siquiera puede hacer el intercambio gaseoso que necesita, casi como si estuviera en un estado de asfixia. Como consecuencia tendremos una planta estresada y débil.

La solución para que el sol no caliente en exceso esa pared y las raíces será tan sencilla como la de poner unos esquejes de alguna planta suculenta que descuelgue y que tape la pared externa de la jardinera, del tiesto o del macetón. Este sedum haría el trabajo perfecto de quedarse él con toda esa radiación solar y evitar el sobrecalentamiento del sustrato; además, nos daría la belleza de sus formas y de su floración.

Cómo hacer un abonado perfecto de nuestras plantas

¿Abonamos todas las plantas en el mismo momento?

Esa es una duda muy frecuente. Como vemos, hay plantas adaptadas para cada situación. Mientras que para unas cuantas este frío las paraliza, a otras parece no influirles demasiado, y están en pleno crecimiento. Esto también va a depender de cada región de España. Mientras que las calas es muy posible que ya tengan flores en las zonas más cálidas, en las regiones más frías puede que incluso hayan perdido todas las hojas y no rebroten desde sus órganos subterráneos de reserva hasta que suban las temperaturas. Nosotros, aquí en Madrid, estaríamos en una situación intermedia, porque vemos que la planta no ha parado de crecer, si bien no está pletórica.

Por lo tanto, si nosotros dijéramos ahora que la cala hay que abonarla, porque está en pleno crecimiento, algún oyente que mirara el macetón de la cala y no viera ninguna hoja se extrañaría. Por eso lo que tenemos que hacer es aplicar la lógica: si vemos que la planta está en crecimiento activo, podemos abonarla. Si la planta está todavía parada, esperaríamos a que retome el crecimiento.

¿Eso significa que debemos abonar las plantas que veamos que están brotando con nuevas hojas y flores?

Exactamente. Son ellas las que me van a guiar en el proceso del abonado, siempre nos fijamos en cómo es su ritmo de crecimiento. Por ejemplo, abonaré esta cala, porque veo que está formando nuevas hojas y flores. También abonaré estos sedum y las otras plantas suculentas de esta jardinera, porque todas coinciden en que están creciendo: unas formando nuevas hojas, otras, como el sedum que acabamos de ver, con flores nuevas.

Otras plantas de nuestra terraza a las que les vendría muy bien un abonado son a las mielarias que crecen en la base de varias macetas, porque están en plena floración y les vendrá muy bien reponer fuerzas con un extra de nutrición. La margarita sudafricana (Euryops chrysanthemoides) está creciendo, cada semana que regreso tiene más hojas y más flores, así que también la voy a abonar. También está bastante activa la fatsia (Fatsia japonica), con sus hojas enormes, o la boina de vasco (Farfugium japonicum). La primera, porque está hinchando los frutos. La segunda, porque está formando nuevas hojas.

¿Abono orgánico y humus líquido?

Siempre, para mí es lo mejor, porque siento que estoy nutriendo no solo a la planta, sino también a la tierra, al sustrato donde crecen nuestras plantas. Además, con un abono orgánico siempre tenemos un margen de seguridad a la hora de no añadir un exceso de sales a la planta. Con los abonos de síntesis química tenemos que ser más cuidadosos, porque podemos afectar a la planta. En el caso de que prefiramos los abonos de síntesis química, tenemos que ser muy estrictos con la dosis que aplicamos a la planta, para no quemarla por un exceso de sales; esta es una precaución que hay que tener tanto si el abono es líquido o sólido.

El que yo utilizo en nuestra terraza es un abono sólido orgánico, un abono granulado que proviene de distintos procesos en los que se generan residuos orgánicos. También utilizo como un mejorante del sustrato el humus líquido, que ayuda a que las raíces de las plantas estén más a gusto y fuertes. Cuando lo aplico, primero echo el humus líquido para que se incorpore bien al sustrato y que la planta lo asimile y estimule su crecimiento. Una semana después de aplicar este humus líquido es cuando abono.