Lo que viene siendo el huevo
Dicen que en Europa puede acabar pasando lo que ya pasa en Estados Unidos, donde los cacos ya no asaltan joyerías o bancos sino hueverías
Ignacio Martínez de Pisón: "Lo que viene siendo el huevo"

Madrid
Dicen que en Estados Unidos todas las gallinas se han convertido en gallinas de los huevos de oro y que el huevo, lo que viene siendo el huevo, el pequeño y humilde huevo, el huevo de toda la vida, se está convirtiendo en el tulipán de la Holanda del siglo XVII, que subió y subió de valor hasta que la burbuja acabó estallando y se llevó por delante la economía del país.
Dicen que en Europa puede acabar pasando lo que ya pasa en Estados Unidos, donde los cacos ya no asaltan joyerías o bancos sino hueverías y los traficantes que antes se arriesgaban a cruzar la frontera con heroína o fentanilo ahora se dedican al contrabando de huevos.
El huevo está en el universo desde el comienzo de todo, cuando el ser humano no existía ni como proyecto. Y ahí lo ves, con su forma acabada y siempre idéntica, con su clara y su yema tan distintas, con su cuerpo de merengue y su alma de tocino de cielo. El huevo, como el blanco de la nieve o la línea del horizonte, es una de esas cosas elementales y perfectas que nos proporciona la naturaleza y, sin embargo, ¿cuántos poetas lo han cantado?, ¿cuántos artistas lo han celebrado?
No empezamos a valorar las cosas hasta que las perdemos. Pobre y querido huevo: si te pinchan, ¿no sangras? Si te envenenan, ¿no mueres? El primer soneto que escriba en mi vida te lo dedicaré a ti.