Cultura y la Academia llegan a un acuerdo para ubicar el primer Museo del Cine en la sede del NO-DO

Era una asignatura pendiente, que el cine español tuviera su propio museo. Una iniciativa que han intentando distintos gobiernos y muchos cineastas y que, finalmente, será una realidad. Así lo han anunciado el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, y el presidente de la Academia de Cine, Fernando Méndez Leite, en el edificio que albergará el futuro museo y que fue la sede del desaparecido NO-DO. "Recuperamos este espacio y recuperamos la memoria cinematográfica de nuestro país. Qué mejor lugar para albergar un espacio del cine que este espacio del NO-DO, con lo que significó para el Franquismo, resignificando lo que fue el espacio y poner en valor nuestra historia cinematográfica", decía el ministro ante la prensa, que ha podido visitar el inmueble, abandonado desde hace años.

Para, Méndez Leite, este acto supone la primera piedra de un proyecto largamente buscado y querido por la Academia de Cine. Una idea que llevaba gestándose desde hace años. "No habíamos comenzado a trabajar en serio en ella, porque no teníamos el lugar, así que la cesión por parte de Cultura de este edificio es un paso estupendo y ahora ya podemos empezar a trabajar". Reconocía también que apenas tienen claro cómo será el museo. "Es un trabajo ingente, que nos va a llevar meses y años y que merece muchísimo la pena. Las ideas que tenemos sobre el futuro del museo están poco definidas, hemos empezado a hablar ahora".

La Academia de Cine liderará el proyecto con un objetivo en mente, acercar el patrimonio cinematográfico a la ciudadanía y poner en valor una de las grandes industrias culturales de nuestro país. "Una historia que hay que contar, que hay que visibilizar y poner en valor", insistía el ministro de Cultura. Para la Academia, el edificio es ideal: "Es fantástico por muchas razones. Se puede tener una colección fija y exposiciones, así como proyectos inmersivos", explicaba el presidente. A imagen y semejanza de los museos que hay en otros países. Pero además, el edificio tiene una historia muy significativa con el audiovisual español. "El edificio albergó el NO-DO, el noticiario semanal que producía el gobierno, a través de la dirección encargada. El noticiario era obligatorio en todos los cines de España", recordaba el presidente.

Se trata de un espacio de 4000 metros, que albergará los archivos de cineastas como Jaime de Armiñán o Iván Zulueta que el ministerio ha ido adquiriendo en los últimos años. El inmueble está ubicado en Velázquez 145, en Madrid. Tras la muerte de Franco y la llegada de la democracia, el edificio pasó por varias etapas y usos. De hecho, el propio Méndez Leite confesaba que trabajó durante cuatro años en este edificio cuando pasó a ser utilizado por RTVE. "Yo empecé a trabajar aquí para hacer un programa de cine español, que contaba el fascismo español desde el cine". Fue utilizado por RTVE, hasta que en 2007 los profesionales de la radiotelevisión pública estatal se retiraron y su mantenimiento fue asumido por el Ministerio de Administraciones Públicas. Parte del edificio fue posteriormente administrado por el Instituto de Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), dependiente del Ministerio de Cultura. En diciembre de 2017 el gobierno del PP anunció un plan para convertirlo en el Museo del Cine bajo la supervisión del Ministerio de Cultura, aunque este proyecto se vio interrumpido por la moción de censura a Mariano Rajoy. Ahora, se reactiva en un momento difícil para el gobierno, sin tener garantizado el apoyo parlamentario y sin presupuestos, para las posibles partidas para su rehabilitación y puesta en marcha.

"La Academia tendrá que buscar las fuentes de financiación necesarias. Ahí entrará financiación estatal y otras administraciones y sponsor privados, como lo hacemos para la gala de los Goya. Una financiación adecuada para llevarlo a cabo, pero antes tendrá que llegar el proyecto, para saber lo que va a costar", reonocía el responsable de la institución. "Lo que anunciamos es el acuerdo para ceder el edificio. A partir de aquí, hay que un proyecto, una museografía, ver las necesidades financiera y tomar las necesidades", insistía Urtasun sobre la financiación.

España no cuenta con ningún museo estatal dedicado a la cinematografía, algo que no ocurre en los países del entorno, como Italia, que cuenta con museo en Turín, o Francia, que cuenta con un museo en la Cinemathèque de Paris, o el Museo del Cine Alemán en Berlín. En esos museos, se explica el trabajo de los diferentes sectores del cine, se expone y se salvaguarda el patrimonio cinematográfico, películas, negativos, trajes, atrezo, decorados, documentos, guiones, etc. Pero además, difunde la historia del audiovisual de un país. Con esta cesión del edificio que albergará el museo, se está más cerca de lograr un espacio dedicado al patrimonio de nuestro cine.