El juego que nació como invencible y que acabó siendo doblegado por un niño de 13 años

Madrid

Hace ya varias décadas, concretamente un 6 de junio de 1984, el soviético Alekséi Pázhitnov publicaba el que sin duda alguna pasará a la historia como uno de los videojuegos más importantes de todos los tiempos. Hablamos sobre el Tetris. Un juego de lógica, que consiste en organizar distintas formas geométricas en una misma caja, que desde entonces ha cautivado a millones y millones de personas en todo el mundo. Más aún desde 1989, cuando Nintendo se hizo con sus derechos y lanzó una versión del videojuego para la icónica Super Nintendo.

A partir de ese preciso instante todo el mundo trató de pasarse el juego. Sin embargo, nadie lo conseguía. Y es que, tal y como explicaba Alekséi Pázhitnov, el Tetris era un juego imposible de resolver debido a su complejidad. Nadie lo consiguió hasta diciembre de 2023, cuando el estadounidense Willis Gibson doblegaba por primera vez al videojuego con tan solo 13 años de edad. Después de 40 minutos de juego intenso, el adolescente se convertía en la primera persona en la historia en ganar al Tetris.

Una partida para la historia

Así nos lo ha contado nuestra compañera Irene en El Faro de la Cadena SER, donde ha relatado una de las historias más increíbles de la historia de los videojuegos. Principalmente porque todo el mundo pensaba que realmente era un juego imposible de batir, tal y como aseguró su creador en tantas ocasiones: "Pázhitnov pensó que ningún humano podría superarlo. De hecho, el nivel 29 es considerado la pantalla de la muerte entre los jugadores de Tetris porque la velocidad a la que caen las piezas parecen imposibles para los dedos humanos".

No obstante, los expertos comenzaron a desarrollar técnicas de lo más variadas para poder doblegar a la máquina. Una de ellas es el rolling, que consiste en golpear constantemente la parte inferior del mando con una mano mientras se pulsa ligeramente los botones con la otra mano. Una técnica que aumenta la velocidad del pulgar y que facilita que el mando pueda mandar las piezas de un lado a otro de la pantalla de una forma mucho más rápida.

"No podía sentir los dedos"

A pesar de las técnicas desarrolladas por los mayores expertos del Tetris, ninguno de ellos superó a la máquina. Hasta la fecha, tan solo la inteligencia artificial había llegado tan lejos como para que el juego se congelara. Y es que, al llegar al nivel 157, el juego se vuelve injugable por falta de código. Eso fue precisamente lo que consiguió el protagonista de esta historia, quien rompió todos los récords después de conseguir 1511 líneas: "No podía sentir los dedos".

Una proeza tan grande que recibió la felicitación personal del creador del juego, quien le dio las gracias por jugar al juego y por haber logrado este hito histórico. Y lo más surrealista de toda esta historia es que solo necesitó dos años para llegar a lo que nadie ha conseguido todavía: "Empecé a jugar al Tetris con 11 años, pero nunca pensé que podía superarlo". Por lo tanto, tan solo necesitó dos años de entrenamiento para doblegar a la máquina. Y no, después de superar todos los obstáculos, no va a cambiar este juego por ningún otro.