El "terrorífico" suceso que cambió la vida de Cucurella y su pareja Claudia en Inglaterra: "Vi a alguien con una bolsa, mirándome"

Marc Cucurella, de 26 años, afronta su cuarta temporada en la Premier League, y lo hace en uno de sus mejores momentos tanto deportivos como personales. Pero el defensa internacional con España, que pudo levantar hace unos meses el título de la Eurocopa, y que se ha convertido en un ídolo para la afición del Chelsea, también ha vivido momentos complicados en su carrera, concretamente en Inglaterra, donde vivió un robo que cambió su vida y el de su pareja Claudia Rodríguez. Ambos participan en el reality televisivo Married to the Game, donde contaron cómo fue ese suceso "terrorífico".

Claudia explicó cómo sucedió todo. "Marc estaba arriba en la ducha con Mateo, yo estaba embarazada de Bella y fui a mi habitación a buscar el biberón para Río, lo tenía en mi cadera. Mientras iba a mi habitación, vi dos puertas cerradas y la luz encendida en la cómoda, y simplemente no se veía bien. No es como solemos dejarlo. Abrí la puerta y vi a alguien dentro con una bolsa, mirándome", recordó. En ese momento, la pareja del futbolista se dio cuenta de lo que estaba sucediendo en su casa de Londres. "Estaba aterrorizada, muy, muy asustada. Sabes, estaba embarazada y con dos niños en casa. Bajé a presionar el botón de pánico y le grité a Marc que viniera. Esperamos en la lavandería y llamamos a la policía, a todos para que nos ayudaran, y fue aterrador", continuó.

Tras este robo, la pareja de Marc Cucurella, tuvieron problemas para dormir. "Me costó mucho dormir los siguientes días, incluso los siguientes meses. No podía ir sola a ningún lado. Siempre necesitaba a alguien. Le decía: '¿Puedes venir conmigo a mi habitación?'", explicó.

Mateo, Río y Bella son los hijos de Claudia Rodríguez y Marc Cucurella, y precisamente de ellos también hablaron durante la entrevista que concedieron al reality. Concretamente de Mateo, de seis años, quien fue diagnosticado con autismo. "Vimos algo diferente en Mateo cuando era pequeño, de unos 13 meses, pero fue un proceso largo obtener el diagnóstico. Cuando era pequeño era más fácil, pero ahora que está creciendo, es más difícil", dijo.

Fue al mudarse a Inglaterra cuando vieron que el pequeño estaba disgustado con el nuevo colegio. "No sabíamos la solución. Tienes que encontrarla tú mismo, y te sientes muy mal porque no estás preparado... Te preparaste para ser madre, pero no para ser madre de un niño autista, así que te sientes mal. Fue muy difícil verlo así, tan afectado, y simplemente intentamos encontrar la mejor solución".

Ella fue quien buscó un colegio especial para Mateo —"un lugar increíble en Londres donde lo comprendían y entendían sus necesidades"—, lo que les hizo mudarse allí, ya que anteriormente vivían en Cobham y tardaban dos horas para recogerlo. "Estaba en el coche todo el día... Ocurrió robo en esa casa y decidí que no quería volver, así que nos mudamos a Londres y eso le facilitó a Mateo llegar a su colegio".

Mateo, tal y como aseguró Claudia, está bien y está trabajando para decir algunas palabras. "No sé si hablará o no. No sé nada, pero estamos intentando hacer todo lo posible por él. Fui a Madrid hace una semana para hacerle unas pruebas; nos pasamos el día entero buscando soluciones, y eso es lo mejor que podemos hacer", reconoció.