La euforia de Rafa Nadal en el Santiago Bernabéu con el gol de Rüdiger por el que el Real Madrid se clasificó para la final de Copa del Rey

El Real Madrid consiguió clasificarse para la final de la Copa del Rey que se disputará el próximo sábado 26 de abril en el Estadio de la Cartuja después de superar a la Real Sociedad por un parcial de 5-4 en toda la semifinal. El tanto de Endrick en el partido de ida terminó resultando determinante después del empate a cuatro que tuvo lugar en el Santiago Bernabéu. Barrenetxea abrió el partido de vuelta y el delantero brasileño del Real Madrid se encargó de colocar el 1-1 con el que terminó la primera mitad. Tras la reanudación, a partir del minuto 70, el encuentro se convirtió en un auténtico correcalles que pudo caer de cualquier lado.

Un autogol de David Alaba supuso el 1-2 y, ocho minutos más tarde, Mikel Oyarzabal materializó el 1-3 con el que los de Imanol Alguacil estaban, en ese momento, clasificados para la final de Copa del Rey. Sin embargo, dos minutos más tarde, Jude Bellingham mandaba el partido a la prórroga al rematar de volea un envío medido de Vinicius. Un cabezazo de Tchouaméni devolvió la clasificación a los de Chamartín, aunque Oyarzabal, en el descuento, forzó la prórroga. En el minuto 115, un cabezazo inapelable de Antonio Rüdiger tras un córner lanzado por Arda Güler dio al Real Madrid la clasificación para la cita de Sevilla del próximo 26 de abril ante Atlético de Madrid o FC Barcelona.

El gol del central alemán, que salió al partido en la prórroga sustituyendo a David Alaba, fue celebrado por todo lo alto -como no podía ser de otra forma- en el Santiago Bernabéu. Una de las cámaras de la retransmisión se fijaron en un nombre propio: el de Rafa Nadal. El extenista balear estaba en el palco del estadio del Real Madrid acompañado de su padre, Sebastián, y vibró por todo lo alto con el cabezazo inapelable de Rüdiger. Se levantó de su asiento y, abrazado al mayor de los Nadal, gritó un eufórico 'vamos' como si de un puntazo suyo de tenis se tratase. Cuando se sentó, trató de recolocarse en el asiento con un claro gesto de nerviosismo mientras asentía a algo que le comentaba su padre.

La celebración de Rafa Nadal en el Santiago Bernabéu no ha tardado en hacerse viral y muchos madridistas le alaban por su forma de sentir el club. "Uno de los nuestros", "qué grande es Rafa" o "siempre en mi equipo" son algunos de los mensajes que más se han repetido en las redes sociales.