Así es como la realeza cambió para siempre el color de las zanahorias: no, no siempre han sido naranjas
Todo fue parte de un homenaje que se les acabó yendo de las manos

Así es como la realeza cambió para siempre el color de las zanahorias: no, no siempre han sido naranjas
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Madrid
Si tuvieras que pintar una zanahoria, ¿de qué color lo harías? Probablemente de naranja, porque son las más habituales en tu frutería más cerca. Sin embargo, las hay de todos los colores. Así lo ha dado a conocer la doctora en Bioquímica y Biología Molecular Rosa Porcel en declaraciones a Hora 25, donde ha hablado acerca de esta hortaliza tan especial y su curioso origen. Porque, aunque nos parezca de lo más habitual, las zanahorias han sido naranjas solo a partir del siglo XVI-XVII: "Antes había zanahorias blancas, moradas... cualquier color menos naranja".
Más información
¿Y qué es lo que provocó que recibieran este color tan característico? La realeza holandesa: "Holanda, que es una cuna bastante importante de la agricultura, siempre se ha caracterizado por su trabajo en el campo de la mejora genética, de los cruces e incluso de las hibridaciones. Y este es un claro ejemplo de ello porque los ingenieros agrónomos de aquella época quisieron rendirle homenaje a la realeza haciendo todo tipo de cruces hasta que obtuvieron la zanahoria de color naranja". Una semilla que se fue propagando por todo el mundo hasta convertirse en la más popular en las fruterías, si bien es cierto que a día de hoy las hay de muchos colores: "Hay un abanico de colores que parece un catálogo de pinturas".
Qué hay detrás de este color
El responsable de este color naranja intenso es el betacaroteno, que es el carotenoide principal en las zanahorias. Una molécula precursora de la vitamina A, con todo lo que ello conlleva. De ahí que siempre se haya dicho que las zanahorias son muy buenas para la vista: "Son buenas para la vista, pero se ha exagerado un pelín. Los ingenieros recurrieron al color naranja para llamar la atención pero, las plantas, no hacen las cosas para que nos gusten a nosotros. Ese color es un pigmento que fabrican para defenderse en algunos casos, para llamar la atención de polinizadores o lo que sea".
Y estos pigmentos son ricos en antioxidantes: "El color naranja es un betacaroteno. Una molécula precursora de la vitamina A que es la que se necesita entre otras cosas para la vista. Si hay una deficiencia en la vitamina A, puede haber problemas de visión. De hecho, la falta de vitamina A supone un problema en algunas zonas del mundo, donde tiene una alimentación muy pobre. De hecho, la experta señala que al menos medio millón de personas en el mundo fallecen cada año por falta de vitamina A.
La leyenda de las zanahorias
Por lo tanto sí, las zanahorias son buenas para la vista, pero no tanto como se nos ha contado una y otra vez: "Es un poco exagerado y todo esto viene por algo que sucedió en la Segunda Guerra Mundial". En declaraciones a la Cadena SER, Rosa Porcel nos cuenta que nos tenemos que remontar hasta la Segunda Guerra Mundial para conocer el origen leyenda de las zanahorias. Concretamente hasta Gran Bretaña, donde las fuerzas nazis estaban bombardeando todo a su paso.

Las entrevistas de Aimar | Rosa Porcel
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Después de que el piloto de la Royal Air Force (RAF) John Cunningham se convirtiera en uno de los grandes héroes británicos por su alto índice de derribos nocturnos contra aviones de la Luftwaffe, el gobierno aprovechó la ocasión para montar toda una campaña de marketing a su alrdedor: "El gobierno puso en marcha campañas de marketing para la población en el que les decían que comer zanahorias le iba a ayudar en los apagones al igual que le ayudaban a John Cunningham en combate". De ahí que las zanahorias sean buenas, pero tampoco tanto como para permitirnos ver en la oscuridad.

David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología que aborda la vida digital desde otro punto...




