"Somos los portavoces de un país que está sufriendo muchísimo": la dura reivindicación del internacional con Palestina Yaser Hamed

Palestina viene de causar sensación en el último parón internacional. La selección llama a las puertas del que sería su primer Mundial y el fútbol ha permitido recuperar una pizca de ilusión en mitad de la tragedia de su guerra activa con Israel. Un triunfo de película sobre Iraq se ha erigido como un motivo de orgullo para los palestinos, que entre sus ídolos de corto han acogido con los brazos abiertos a un talento de origen español y con sello de Lezama. Yaser Hamed ha sido protagonista en el SER Deportivos de este viernes, donde ha querido reivindicar la lucha de su pueblo ante la masacre y el papel que está ejerciendo el fútbol en el día a día de sus compatriotas.

Desde Leioa (Vizcaya), Hamed recurrió a sus raíces para convertirse en un bastión del país de su padre. El central aceptó la llamada de Palestina para defender su bandera, siguiendo una oleada de reclamos que ha llevado al equipo a dar un paso adelante deportivamente reclutando a deportistas con pasado en sus fronteras. En el caso del hispanopalestino, reconoció ante Pacojó Delgado que ser internacional palestino "es un orgullo": "Lo hago con mucho honor siempre", explicó, consciente de la connotación añadida que supone representar a un territorio azotado por la guerra. "Cuando pasan este tipo de cosas el fútbol pasa a un segundo plano. Somos más que nada los portavoces de todo un país y una tierra que está sufriendo muchísimo", sostuvo Hamed, quien expuso la realidad de su selección en busca de "otros países" para realizar las concentraciones.

Pese a las dificultades, han sido capaces de sacar sonrisas en su país con su última victoria premundialista. Palestina ganó a Iraq dándole la vuelta al partido con goles en los minutos 88 y 98 y disparó la sensación de que acudir al Mundial 2026 era una posibilidad más cercana que nunca: "Fue una alegría tremenda, casi un milagro". "No sé qué pasó, pero todavía estamos dentro y nos la jugamos todo en los dos partidos de junio", comentó el jugador, consciente de la euforia con la que se vivió la gesta del equipo.

"Esto es una pequeña alegría para ellos. Aunque estén sufriendo, sé que les hace muy felices", añadió Hamed, consciente también del salto de calidad que han dado en los últimos años y que podría multiplicar la repercusión del pueblo palestino. "Sirve para poder dar voz a Palestina. Sé de primera mano que la gente que está en Gaza sufriendo nos ve todos los partidos. Para ellos, una victoria es una locura. Dentro de lo que están sufriendo, vivir una victoria para ellos es una alegría tremenda. Después de esta victoria, hemos recibido muchísimas felicitaciones. Ver cómo peleamos cada balón y cómo nos dejamos el alma en el campo es un orgullo para ellos", reconoció.

"El pueblo de mi padre ya no existe"

Después de muchos años compartiendo vestuario con cracks actuales del Athletic Club como Unai Simón, Yaser Hamed asume un nuevo reto que va más allá de lo futbolístico. Y es que, como apuntó en esta entrevista, desde su posición quiso "reivindicar todo lo que está pasando en Palestina" y "lo que está sufriendo Gaza no solo ahora ,sino durante muchísimos años". "Un país y una persona lo que tienen que tener como mínimo es libertad: de movimiento de expresión... y poder vivir en paz y tranquilidad. Todo esto tiene que acabar muy pronto".

De hecho, por lo que le toca más de cerca, reflejó la dureza del conflicto armado al asegurar que el pueblo natal de su padre "ya no existe": "Esa parte de Gaza ya está destrozada completamente. Toda la familia de mi padre se tuvo que marchar al sur. Nosotros intentamos ayudar en todo lo que podemos a mi familia que está allí y esperemos que acabe todo muy pronto, porque es un sinvivir", insistió, haciendo un llamamiento a la paz tras años de pérdidas humanas y materiales sin fin.