Dejadas, golpes entre piernas, de espaldas y un revés ganador: Alcaraz pone en pie Montecarlo con un puntazo de videojuego

Por la puerta grande alcanzó Carlos Alcaraz los cuartos de final del Masters 1.000 de Montecarlo. Toda una exhibición dio el tenista español este jueves en su segunda eliminatoria sobre la tierra batida de Mónaco. Y es que, tras el susto de su debut en el que cedió el primer set del torneo, el de El Palmar pasó por encima del alemán Daniel Altmaier en menos de hora y media de juego.

Pese a lo breve del encuentro, el público asistente al Montecarlo Country Club pudo deleitarse con minutos de pura fantasía. En medio del vapuleo, Alcaraz tuvo tiempo de gustarse, sacando de quicio a su rival. Prueba de ello ha sido el punto que ya está dando la vuelta al mundo, toda una oda al tenis de cerca de medio minuto. Ataques arriesgados, defensas milimétricas y carreras inverosímiles vistieron de lujo el puntazo con el que Carlos Alcaraz puso en pie al graderío mientras se llevaba la mano a la oreja agradeciendo la ovación que le estaban brindando.

Ya con poco que perder, Altmaier arriesgó en un intento de pagarle a Alcaraz con su propia medicina. Tras el servicio del actual número 3 del mundo, el alemán rompió el peloteo desde los fondos de pista con una buenísima dejada que hubiese firmado el mismo Alcaraz. Era muy difícil de mejorar, pero el tenista murciano exprimió sus piernas para salvar una pelota casi imposible. Su contradejada dio continuidad a un show del más alto nivel.

Un forzado Altmaier llegó justo a tiempo para ponerla en la línea, obligando a correr marcha atrás a un Alcaraz que la devolvió con un globo entre sus piernas. Pero en el punto de nunca acabar había pendiente otra respuesta. A la remanguillé, Altmaier logró responder con otro raquetazo de espaldas a la red, aunque dejó la pelota en bandeja para que Alcaraz, con maestría, finiquitase el punto con el revés que hizo atronar la pista monegasca. La grabación, todo una delicatessen para los amantes del tenis.