Estados Unidos cesa a la coronel al cargo de su base en Groenlandia por llevar la contraria al vicepresidente de Trump

Madrid

Según el vicepresidente estadounidense, J.D. Vance, Dinamarca tiene Groenlandia completamente desatendida y nadie puede decir otra cosa. El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha cesado a la coronel Susannah Meyers como jefa de la base militar de Pituffik, porque tres días después de la visita del número dos de Trump a sus instalaciones en la isla, envió un email llevándole la contraria.

En el mensaje, que recibió todo el personal de la base militar, la coronel afirmaba que el lugar alberga trabajadores de diversas nacionalidades —estadounidenses, daneses, groenlandés y canadienses— y que su misión es cooperar con otros países, no servir como una herramienta para forzar un cambio de soberanía de la isla.

"No pretendo comprender la política actual, pero lo que sí sé es que las preocupaciones de la administración estadounidense, abordadas por el vicepresidente Vance el viernes, no reflejan la situación en la Base Espacial Pituffik", escribió Meyers. Un mensaje que ha molestado mucho en la Casa Blanca.

Un portal de información militar filtró el contenido del mensaje el jueves y, unas pocas horas después, Meyers fue cesada. Las autoridades militares emitieron un comunicado en el que hablan de pérdida de confianza, sin hacer mención explícita al email. En el mensaje añadían: "Se espera que los comandantes se adhieran a los más altos estándares de conducta, especialmente en lo que se refiere a permanecer imparciales en el desempeño de sus funciones".

El comunicado es escueto, pero hay cargos que se han pronunciado en mayor profundidad. El portavoz del Pentágono, Sean Parnell, escribió en sus redes sociales, adjuntando una imagen del comunicado, que el Departamento de Defensa no toleraría acciones que socaven la cadena de mando o subviertan la agenda del presidente Trump.

La visita de Vance

El viaje del vicepresidente de Trump, que causó gran controversia, fue un ataque frontal a Dinamarca. Una visita llena de desprecios, con declaraciones afirmando que el país europeo había abandonado la isla a su suerte, sin ocuparse de su seguridad.

El viaje que molestó enormemente en Dinamarca. El ministro de Asuntos Exteriores danés, Lars Løkke Rasmussen, contestó a Vance pidiendo una retórica menos agresiva: "Se han hecho muchas acusaciones y alegaciones y, por supuesto, estamos abiertos a las críticas, pero seamos sinceros: no nos gusta el tono [...] Así no se habla con aliados cercanos, y sigo considerando a Dinamarca y Estados Unidos como aliados cercanos".

Está previsto que la situación de la isla sigua generando titulares. Trump ha dejado muy claro que no va a cambiar de opinión y tiene la firme convicción de hacerse con la isla. En la OTAN el tema también provoca tensión, al involucrar a dos países, EEUU y Dinamarca, miembros de la alianza. Mark Rutte, secretario general de la alianza, ya ha tenido que realizar equilibrismos para justificar la postura estadounidense que atenta contra la integridad territorial de un aliado.