La empresa española que ha inventado un "traductor" para que los contratos dejen de ser un galimatías

Reinventar los textos legales. Ese fue el objetivo que se propuso Carlota Albanell cuando, hace cinco años, detectó una de las grandes barreras entre la ciudadanía y el mundo jurídico: la incomprensión de los mismos. Hoy, como fundadora y CEO de Clip Pictolex, lidera una empresa que transforma documentos legales densos y farragosos en textos claros y accesibles para cualquier persona sin perder un ápice de validez jurídica. Y es que, ¿cuántas veces hemos firmado contratos —de alquiler, de trabajo, de seguros— sin entender realmente qué estamos aceptando? ¿Y cuántas veces, por miedo o desconfianza, hemos evitado firmar algo que podría habernos beneficiado? Según ha explicado Albanell en La Ventana, la incomprensión legal tiene efectos reales y muy costosos: «En el ámbito de Internet, hasta un 70% de las compras no se finalizan porque no nos fiamos de lo que estamos haciendo, por miedo a firmar algo que no entendemos», ha comenzado explicando. En sectores como los seguros, la banca, el inmobiliario o la administración pública, donde el impacto de un malentendido puede ser enorme, la falta de claridad se convierte en una barrera. Albanell pone un ejemplo muy gráfico: muchas ayudas sociales no llegan a quienes las necesitan porque el proceso para solicitarlas es tan confuso que la ciudadanía se desanima o desconfía del procedimiento. Frente a este panorama, Clip Pictolex propone hacer comprensibles los textos legales. El primer experimento fue casi una declaración de intenciones: un contrato de alquiler en formato cómic, donde cada viñeta explicaba una cláusula de forma visual. «Un amigo me pidió que redactara un contrato de alquiler pero quería que su madre lo entendiera. Preparé un contrato tradicional de alquiler y me di cuenta de que no lo iba a entender. Pensé que se podría hacer más visual y comprensible. Cada clausula era una viñeta e iban explicando las condiciones del contrato en forma de viñetas. »En España hay una cosa que se llama libertad en forma de contrato, como Messi que firmó su contrato en una viñeta. Un contrato visual entra dentro de esta libertad de forma, ha contado Albanell. A partir de ese punto, el proyecto evolucionó. Hoy, Pictolex trabaja con infografías, rediseño visual de documentos en Word y una metodología basada en el «lenguaje claro», respaldada por normativas internacionales como la ISO. Pero simplificar un documento legal no es simplemente cambiar palabras complejas por otras más sencillas. Requiere una reestructuración profunda: pensar en la persona que lo leerá, destacar lo importante, organizar mejor la información y eliminar lo que genera ruido sin aportar valor. Los principales clientes de Pictolex son, por ahora, administraciones públicas y grandes empresas, entidades con un gran volumen de documentos y una necesidad urgente de mejorar su comunicación. Sin embargo, el objetivo de la compañía es llegar también al público general a través de herramientas tecnológicas que permitan escalar el servicio. «En 2021, hubo más de 120.000 sentencias por cláusulas abusivas y mas de un 97% dieron la razón al cliente. Es un problema vigente. Se ha mejorado la situación desde 2008 pero es un problema real», ha concluido Albanell.

La empresa española que ha inventado un "traductor" para que los contratos dejen de ser un galimatías

Fundada por Carlota Albanell, esta 'legaltech' convierte textos jurídicos complejos en documentos comprensibles gracias a sus diseños, la tecnología accesible y el conocimiento legal

Álvaro García-Dotor

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