'La herencia de Eszter', una novela sobre la traición y la entrega
Sándor Márai publicó esta obra en 1939. Una historia de amor, deseo, traición y soledad

'La herencia de Eszter', una novela sobre la traición y la entrega
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Sándor Márai nació en 1900 en Kassa, una pequeña ciudad húngara que hoy pertenece a Eslovaquia y se suicidó en San Diego, California en 1989.
De estilo realista y descarnado, se le ha comparado con Mann y con Zweig. Abandonó su país en 1948, con la llegada del régimen comunista, y emigró a Estados Unidos. La prohibición de su obra en Hungría le hizo caer en el olvido durante mucho tiempo. Es el autor de 'El último encuentro', 'Divorcio en Buda', 'Los celosos', 'La amante de Bolzano' o 'La mujer justa', entre otras.
'La herencia de Eszter' se publicó en 1939. Puede ser una alegoría sobre el contexto global de su época, pero además es una impresionante historia de amor, deseo, traición, y soledad. Es una obra triste, profunda, sorprendente y emocionante.
Como señala Javier Cercas Rueda en AcePrensa, Sándor Márai es un indagador de los hilos que mueven el destino del hombre, un novelista de honda preocupación moral, que se atreve, como los clásicos, con las grandes preguntas sobre el sentido de la vida. Lajos representa la modernidad en su vertiente de invalidez moral. Hombre de talento y buenas intenciones, pero sin carácter, vive la vida como una aventura, sin responsabilidad, sin conexión con la realidad. Eszter, por el contrario, representa la ley, la costumbre, la razón. La novela representa el choque de conciencias -las creencias contra el nihilismo- que simboliza la crisis finisecular del imperio austro-húngaro. Sándor Márai escribe breve e intenso, con elegante precisión, en primera persona, a modo de confesión. De ese modo, provoca desde la primera página un intenso interés por los personajes, no por la acción.
Según Santiago Triana Sánchez, gran parte de las obras de Sándor Márai tienden a hacer una radiografía de la moral y la espiritualidad decadentes de la Europa que veía la llegada de Adolf Hitler al poder en Alemania, situación que iba en detrimento del humanismo que predicaba. En ese sentido, descubrir la obra de Márai es tan importante como descubrir el telón de fondo de cada una de sus historias. 'La herencia de Eszter' es un gran ejemplo de ello. El psicoanalista Juan Fernando Pérez va más allá del mero papel y se atreve a decir que esta breve novela es, vista con otros ojos, una metáfora de la entrega de Alemania al nazismo y a Hitler. El libro de Márai es una metáfora del panorama europeo de las décadas de 1930 y 1940.
Márai narra entre líneas aquello que está sucediendo en la Europa decadente, y su sentir al respecto. 'La herencia de Eszter' es un ejemplo preciso para ilustrar cómo Márai crea hábiles alegorías sobre el contexto global de su época, plasmadas, además, en textos finos y amenos. Pero su capacidad de contar temas de tal densidad con una maestría gigantesca no para ahí. Hungría, un referente notable a lo largo de su obra, no quedaría fuera de sus historias. 'La herencia de Eszter' contiene varios temas de una gran profundidad, así como una historia intensa difícil de olvidar. La traición, la soledad, la oscuridad tanto exterior como interior, que ahoga a los personajes, que les arrastra a comportamientos erróneos que les pasarán factura de una manera definitiva y dolorosa.
No solo la historia atrapa por su gran cantidad de emociones y sentimientos encontrados, por la contradicción de los sentimientos de Eszter y sus reacciones que, aunque en parte podemos comprender, no compartimos, sino también por la atmósfera que el autor logra crear y que impregna toda la novela. Esa sensación de impotencia, de pérdida antes de que la pérdida misma llegue, de inevitabilidad. La historia nos la cuenta la propia Eszter a cuyo lado nos posicionamos inmediatamente, con la que sentimos el peso de esa soledad, de esa herencia familiar que poco a poco se le va escapando entre los dedos, ese amor no consumado, esos años perdidos en soledad, en esa casa opresiva de la que se nos cuenta poco pero que podemos imaginar en tinieblas, dos mujeres que son ya pasado, que no cuentan para nadie, frente a la vitalidad de Lajos, un vividor, estafador y manipulador, que no duda en usar toda su palabrería cuando se trata de conseguir lo que quiere.
Desde el punto de vista psicoanalítico, Jorge Bafico señala que probablemente quien haya leído 'La herencia de Eszter' quede con un retrogusto extraño; una mezcla de angustia e impotencia. Lajos está en el grupo de los 'verdaderos psicópatas' ya que conmueve en una manipulación teatralizada sin ningún tipo de violencia física. Se trata de una personalidad cínica, calculadora, frívola, infractora, mentirosa y sin escrúpulos, pero también de una personalidad irresistible y encantadora para su público, en este caso Ezster. Lajos no se siente transgresor, simplemente confiesa que le falta carácter, el que le podría haber dado Ezster, la única culpable de su desdicha. Es muy clara su ausencia de culpabilidad; él demanda, impone formas sutiles de exigencia e incita a Ezster a sentir culpa y lástima por él. Ezster, en cambio, no es psicopática, más bien lo contrario, pero necesita de Lajos; en ese punto son una verdadera pareja.