Hamás rechaza la última oferta de alto el fuego de Israel

Madrid

Hamás ha rechazado formalmente la última propuesta de alto el fuego de Israel, afirmando que no aceptará un acuerdo “parcial” que no garantice el fin de la guerra ni la retirada total de las tropas israelíes de Gaza. El principal negociador de Hamás, Khalil al-Hayya, acusó al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de haber presentado una oferta que no incluye un acuerdo que conduzca al fin de la guerra o, al menos, a la retirada del ejército israelí de la Franja de Gaza.

En este momento, hay 58 rehenes retenidos en Gaza que fueron capturados por Hamás tras el ataque del 7 de octubre de 2023 al sur de Israel, y se cree que 24 de ellos aún están vivos. En este contexto, la oferta más reciente de Israel a Hamás proponía la liberación inicial de 10 rehenes a cambio de un cese del fuego de 45 días y la liberación de prisioneros palestinos, con la promesa de continuar discutiendo el fin de la guerra y restaurar la ayuda humanitaria a Gaza.

Israel incluía en su acuerdo una de las líneas rojas de Hamas

Por primera vez, Israel exigió el desarme completo de Hamás como parte del acuerdo, lo cual, según el grupo militante, constituye una línea roja. Hayya reafirmó que la tenencia de armas por parte de Hamás era un derecho natural de defensa. En una declaración en vídeo, Hayya afirmó que Hamás ya no está dispuesto a aceptar “acuerdos parciales como cobertura para su agenda política, que se basa en continuar la guerra de exterminio y hambre”.

Según el dirigente islamista, Hamás estaba dispuesto a aceptar un paquete integral que garantizara la liberación de todos los rehenes, a cambio de un número acordado de prisioneros palestinos retenidos por Israel. Una condición clave, añadió, era que Israel debía poner fin por completo a la guerra contra el pueblo palestino y retirarse de la Franja.

Israel sigue bloqueando la entrada de ayuda en Gaza

Esta semana, el ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, dejó en claro que las tropas israelíes tenían la intención de permanecer en las "zonas de seguridad" que habían establecido en Gaza desde que colapsó el alto el fuego con Hamás en marzo, y aseguró que no hay planes para permitir el ingreso de ayuda en Gaza. En concreto, desde el 2 de marzo se ha bloqueado la entrada a Gaza de suministros de ayuda, como alimentos, agua y combustible, por lo que Hamás ha acusado a Israel de utilizar la hambruna masiva como arma, lo que, según ellos, constituye un crimen de guerra.

En las últimas semanas, las tropas israelíes han tomado el control de aproximadamente el 30 % de Gaza, incluyendo partes de Rafah. Más de 1.600 personas en Gaza han muerto desde que se rompió el alto el fuego. Desde el 2 de marzo se ha bloqueado la entrada de suministros de ayuda, como alimentos, agua y combustible. Hamás ha acusado a Israel de utilizar la hambruna masiva como arma, lo que, según ellos, constituye un crimen de guerra.

Israel promete atacar con mayor intensidad después de la negativa de Hamas

Tras el rechazo del acuerdo por parte de Hamás, el ministro de Finanzas de extrema derecha de Netanyahu, Bezalel Smotrich, declaró que era hora de "abrir las puertas del infierno" en Gaza. A principios de esta semana, Katz se había comprometido a intensificar el conflicto con “fuerza tremenda” si Hamás no devolvía a los rehenes. Los intentos de los mediadores de Egipto, Catar y Estados Unidos para restablecer el alto el fuego y traer de vuelta a los rehenes se han topado con grandes obstáculos, y no se logró ningún progreso en la última ronda de conversaciones en El Cairo esta semana, según los funcionarios.

También se teme por la vida de los rehenes que aún siguen vivos, mientras Israel continúa sus ataques aéreos contra Gaza. Esta semana, un portavoz del brazo armado de Hamás declaró haber perdido contacto con el grupo que retenía al rehén israelí-estadounidense Edan Alexander tras un ataque directo contra su ubicación. Por su parte, la Casa Blanca criticó a Hamás por rechazar el acuerdo ofrecido por Israel.