Plantas que se 'resiembran' y flores que cambian de color
Eduardo Barba cuenta en 'Hoy por hoy' qué plantas aparecen de forma espontánea

Plantas que se resiembran y flores que cambian de color
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Los alhelíes (Erysimum cheiri) han disfrutado siempre de mucha afición populas porque es una planta muy florífera muy fácil de cultivar. Tiene mucha facilidad para autosemillarse, y eso hace que también sea un aliciente para tenerla en las huertas, en las entradas a las casas, en los jardincillos... Cuando una planta se resiembra, es un gustazo, porque muchas veces te ayuda a tener un jardín más bonito. Otras veces no, claro, porque entonces puede convertirse en una planta invasora que hay que controlar.
Nosotros tenemos varias plantas que se resiembran ellas solas. Una es el diente de león (Taraxacum officinale), una planta que traje en uno de los primeros programas, dedicado a las mal llamadas malas hierbas, las hierbas espontáneas que crecen en la ciudad. traje ortigas (Urtica urens), uña de gato (Sedum album), pamplinas (Stellaria media), incluso alguna amapola (Papaver rhoeas). Algunas de estas hierbas espontáneas se han establecido en las macetas de la terraza, y disfrutamos de las pamplinas que salenen las grietas de las baldosas o de las uñas de gato que he ido extendiendo por la base de algunas macetas, acompañando a otras plantas, como nuestra encina (Quercus ilex).
El diente de león es una de estas plantas que se han ido resemillando o resembrando por ella misma, y nos sale por aquí y por allá. Cuando nace en un sitio apropiado, me gusta dejarlo. Así, siempre hay algún diente de leónque regala sus preciosas flores amarillas y sus frutos esféricos plateados llenos de semillas. Estas semillas han salido volando por la Gran Vía, y seguro que hay muchos dientes de león por la zona del centro de Madrid que son hijos de nuestra planta madre que trasplanté desde un césped de un parque madrileño.

Otras de las plantas que tenemos que se autosemillan son las mielarias o lobularias (Lobularia maritima), una favorita mía. Echa muchas semillas, que suelta por todos lados. De hecho, también están saliendo lobularias o mielarias en las grietas de las baldosas, convirtiendo la terraza en algo más natural y amable. Lo mismo hacen las margaritas mexicanas (Erigeron karvinskianus) o los tagetes (Tagetes erecta), que salen en muchas macetas. Lo que hay que hacer, tanto con unas plantas como con otras, es ver cuáles dejas y cuáles quitas. A veces también lo que hago es trasplantarlas, y si veo que ha nacido en un sitio donde va a competir con otra planta, la quito de allí y la planto en un lugar más apropiado.
Este año recogeré las semillas de estos alhelíes y las sembraré en alguna maceta más, para conseguir más plantas que adornen con sus flores las mañanas de marzo, abril y mayo, gracias a su periodo de floración tan largo.
PLANTAS QUE CAMBIAN DE COLOR
¿Es normal que una planta cambie sus flores de color?
No es tan habitual, pero no es extraño tampoco. Hay una cosa curiosa que hacen bastantes flores, y es la de avisar a sus polinizadores de cuándo ya no hace falta que vengan a polinizarla, porque ya la han polinizado, y que es mejor que se dirijan a otra flor más receptiva que los necesite.
Castaño de indias
Una de estas flores que cambian de color, está abriendo ahora en muchas partes de España. Es la flor de los castaños de Indias (Aesculus hippocastanum). Cuando la flor se abre, sus pétalos blancos tienen unas manchas centrales amarillas o de color crema. Lo curioso es que, a medida que envejece en los siguientes días, esa mancha amarilla vira a un color primero anaranjado claro y después a un tono fucsia o rosa fuerte. Es una señal para los polinizadores, que así saben que las flores recién abiertas y más ricas en néctar son las de las manchas amarillas.
Alheli 'Leya Purple Glow'
Esta es una fantasía maravillosa. Se trata de un cultivar de Erysimum que recibe el nombre de 'Leya Purple Glow'. Es un alhelí muy peculiar, porque sus pétalos tienen un color amarillento anaranjado cuando se abren, pero
van cambiado de color y evolucionan primero a un anaranjado fuerte para terminar siendo de color fucsia. Estos cambios de color en los pétalos de una planta, a medida que esos pétalos envejecen, es una maravilla que aporta mucho dinamismo al jardín. Es la primera vez que voy a cultivar este alhelí 'Leya Purple Glow', y tengo curiosidad por ver si es una planta que vive tantos años como estos otros alhelíes amarillos.
Lantana o "bandera española"
Nosotros tenemos aquí una planta que es la lantana (Lantana camara). En muchos sitios se la conoce como bandera española, porque tiene tonos amarillos y rojos en la misma inflorescencia. Al igual que las flores del castaño de Indias, las de la lantana también abren en un color amarillo que evoluciona al rojo a medida que envejece en los siguientes días. En el caso de nuestra lantana, al tratarse de un cultivar, tiene otros colores: abre en amarillo y va mutando al rosa. Este cambio tiene que ver con la presencia de las antocianinas, el grupo de pigmentos del que hemos hablado aquí alguna vez, que tiñen las hojas de colores rojizos y anaranjados. También hablamos una vez que estas antocianinas dan el color característico a las fresas, a las uvas o a las manzanas, por ejemplo.
Rosa 'Mutabilis'
Una planta favorita mía que también cambia el color de sus pétalos es la rosa 'Mutabilis' (Rosa chinensis 'Mutabilis'). Al abrir, sus flores son de color melocotón con tonos amarillentos, que viran al rosa claro y más tarde al rosa más fucsia. Es un espectáculo increíble, desde luego.
La pulmonaria
La pulmonaria (Pulmonaria officinalis) es una planta autóctona europea muy interesante. Sus hojas son fascinantes, con esos lunares de color plateado de distintos tamaños, algunos tan pequeños como si fueran puntos, otros lunares más grandes, que incluso se fusionan entre sí.
Si tocamos las hojas, notaremos que tienen una vellosidad, de nuevo para proteger a la planta de sus depredadores. También es una planta con pequeñas flores que son rosas antes de abrir y tiñen en azul cuando abren, una preciosidad muy típica de esta familia, las borragináceas. A
esta familia pertenece la borraja (Borago officinalis), otra planta que tenemos en la terraza y que está en plena flor. También la borraja vira ligeramente en sus pétalos del azul al rosa. En el caso de estas plantas el cambio de color tiene que ver con un cambio en el pH de los pétalos. Al pasar de un pH ácido a un pH alcalino, la flor transforma su color.
Nuestra pulmonaria es, además, un cultivar jardinero, cuyo nombre es 'Trevi Fountain', en honor a la Fontana di Trevi romana. Nosotros la vamos a cultivar en la sombra más sombreada de la terraza, porque a la pulmonaria lo que le gustan son las sombras para crecer. Gracias a sus hojas variegadas con esos lunares plateados vamos a conseguir un poco más de color allá donde crezca.
¿Por qué el nombre de pulmonaria? ¿Tiene algo que ver con nuestros pulmones?
Sí, ya que desde la Edad Media se creía que esta planta curaba las afecciones que tuvieran que ver con los pulmones, como catarros o bronquitis. Parece ser que la fama le viene de la similitud de sus hojas con la forma de los pulmones. Esta semejanza se extiende también a que el punteado de sus hojas sería equiparable a los bronquios de los pulmones.

Eduardo Barba
Eduardo Barba Gómez es jardinero, investigador botánico en obras de arte, paisajista y profesor de jardinería....




