Isabel Coixet: "Soy una cotilla total, los directores somos como los cerdos: aprovechamos todo"

Madrid

En esta edición especial de La Ventana con motivo de Sant Jordi, el cine y la literatura se han dado la mano en una conversación entre dos creadoras que han sabido convertir su conexión profesional en una película que cosechó grandes elogios como Un Amor. Isabel Coixet, una de las directoras más reconocidas y prolíficas del cine español, y la escritora Laura Ferrero, han compartido micrófonos en La Ventana este miércoles desde Barcelona para reflexionar sobre las diferencias entre escribir novelas y guiones, libros, y los vínculos invisibles que construyen las historias, ya que ambas han trabajado en la adaptación cinematográfica de Un amor, la novela de Sara Mesa.

Coixet, cuenta Ferrero, le propuso escribir juntas el guion de Un amor, confiando en su instinto y talento sin haber visto aún nada escrito. "Me quedé sorprendidísima cuando me ofreció escribir un guion. Me fui con el encargo a casa y tuve que buscar todo desde un principio. Fue una maravilla porque siempre pienso en gente como ella que te da una primera oportunidad. Hace cinco años que me dedico a escribir guiones, pero se lo debo a su generosidad", ha explicado la escritora. Aquel gesto marcó el inicio no solo de una colaboración profesional, sino también de una amistad duradera.

"La chavala (Laura Ferrero) tenía madera. Había leído sus relatos y su novela. Pensé que un guion le saldría bordado. En Un Amor, yo había leído todo de Sara Mesa. Esta adaptación nos ha unido a las tres, porque vi a Laia Costa como Nat", ha explicado por su parte Coixet sobre esta colaboración con Ferrero a la hora de adaptar a la novelista Sara Mesa.

Hace poco que la cineasta ha terminado el rodaje en Roma Tre ciotole, basada en el último libro de la escritora sarda Michela Murgia, fallecida en 2023. La historia gira en torno a una ruptura sentimental que deja heridas profundas. La directora, que también ha estado rodando en París una serie para el canal Arte, ha explicado que cuando viaja procura visitar librerías. Una de sus favoritas es Cesaretti, en Roma, abierta desde 1888. También mencionó con cariño su refugio en un diminuto pueblo francés con más librerías que calles: “Allí la literatura te rodea, casi sin darte cuenta”.

Coixet también ha contado que busca la inspiración para sus películas en cualquier sitio. "Me inspiro en la gente que me cuenta cosas. En vídeos, en danza, en pinturas. En conversaciones escuchadas sin que se den cuenta. Soy una cotilla total, los directores somos como los cerdos, que aprovechamos todo", ha dicho entre risas. Además, charlando sobre su película La Librería, afirma que ha despertado muchas vocaciones de libreras. "Conozco a tres mujeres que han abierto tres librerías por la película", ha dicho.